¿Cómo afecta el estrés al sistema inmunitario?
El Instituto Nacional del Cáncer define el sistema inmunitario como un sistema complejo de células, órganos y tejidos que protegen el cuerpo de bacterias, virus y microconductos. Organismos que intentan invadirlo. Los científicos e investigadores han sabido durante años que existe una conexión entre el estrés y el sistema inmunológico. Un informe en la edición de noviembre de 1990 de Psychological Bulletin, afirma que el estrés suprime la función del sistema inmunológico y que, con el tiempo, el sistema inmunitario no se adapta, sino que continúa desgastándose. Lo que estaba destinado a proteger el cuerpo, comienza a dañarlo cuando no está regulado. El efecto del estrés en el sistema inmunológico se ha relacionado con el cáncer, el SIDA y otros trastornos autoinmunes.
Demasiado estrés
La forma en que el estrés afecta al sistema inmunitario es complicada pero bien explicada por Harrison Wein, Ph. D, en el boletín de los Institutos Nacionales de la Salud, "Word on Health". En el artículo, "Estrés y enfermedad: nuevas perspectivas", el Dr. Wein afirma que el estrés produce una hormona en el cuerpo llamada cortisol. El cerebro reconoce el cortisol como la hormona de "lucha o huida", y cuando se produce, otras funciones del cuerpo se detienen hasta que la situación estresante haya pasado. Esta es la forma en que el cuerpo se ocupa de una emergencia inmediata. El sistema inmunológico también recibe señales para disminuir la velocidad, mientras que el cortisol hace su trabajo. Pero con el estrés crónico, sin embargo, el sistema inmunológico se mantiene a baja velocidad, dejando al cuerpo vulnerable a infecciones y enfermedades. Las enfermedades comunes provocadas o empeoradas por el estrés son las enfermedades cardiovasculares, los problemas digestivos, las afecciones de la piel y la mala función de la memoria.
Poco estrés
Según el Dr. Wein, también puede tener muy poco estrés en el cuerpo también. Si eso sucede, no hay ningún sistema que controle el sistema inmunológico. Cuando se le deja hacer lo que quiere, el sistema inmunitario a menudo comienza a atacar a los invasores sanos, y cuando eso sucede, puede desarrollar enfermedades inflamatorias como la artritis o la tendinitis. Sin embargo, la población general no tiene que preocuparse por el estrés demasiado pequeño.
Controlando el estrés para la función inmunológica
La Clínica Mayo informa que cuando los niveles de hormonas del estrés disminuyen, otros procesos corporales como el corazón La tasa y la función inmune vuelven a la normalidad. A medida que los niveles de cortisol disminuyen, las células del sistema inmunológico comienzan a reanudar su función de proteger el cuerpo.
Si bien no puede evitar todas las tensiones que se le presentan, puede aprender a controlar su reacción. Aprender a lidiar con el estrés de una manera saludable minimizará los efectos negativos que tiene sobre el sistema inmunológico. La Clínica Mayo recomienda la meditación, el ejercicio, el asesoramiento y las buenas relaciones interpersonales como formas constructivas de manejar los desafíos diarios de la vida.