Alimentos Proteínicos y Reflujo Ácido

Nada pone un freno a una buena comida como la acidez estomacal. Si tienes reflujo ácido, el placer de comer puede convertirse rápidamente en una pesadilla. Afortunadamente, no estás condenado a una vida de incomodidad. Los cambios simples en su dieta y estilo de vida pueden ayudarlo a controlar los síntomas del reflujo ácido. Consulte a su médico para obtener recomendaciones específicas o si su afección empeora.

GERD

El reflujo ácido es un nombre abreviado para la enfermedad de reflujo gastroesofágico, o GERD. Según la Clínica Mayo, la ERGE es una condición crónica causada por un reflujo de ácido estomacal hacia el esófago. El ácido irrita el revestimiento del esófago y causa síntomas incómodos como ardor de estómago, dolor de pecho y tos seca. La mayoría de las personas tienen un reflujo ocasional, pero si ocurre más de dos veces por semana, los médicos lo llaman ERGE. Si no se trata, la ERGE puede causar daño permanente al esófago, lo que provoca un estrechamiento del esófago o una herida abierta.

Causas

Un esfínter esofágico inferior debilitado o relajado causa ERGE. El esfínter esofágico inferior es una banda circular en la parte inferior del esófago. Cuando tragas, esta banda se relaja, permitiendo que los líquidos y los alimentos se muevan hacia el estómago. Ciertas condiciones aumentan su riesgo de ERGE. Estos incluyen obesidad, embarazo, hernia de hiato, diabetes y esclerodermia, un trastorno del tejido conectivo. Algunos medicamentos también pueden provocar ERGE, explica el sitio web MedlinePlus. Por ejemplo, los broncodilatadores para el asma, los sedantes para la ansiedad, los antidepresivos tricíclicos y los bloqueadores del calcio para la presión arterial pueden exacerbar el reflujo ácido.

Tratamiento

El tratamiento del reflujo ácido depende de evitar las bebidas y los alimentos que provocan síntomas. Cada persona tiene sus propios alimentos desencadenantes específicos, aunque hay algunos alimentos conocidos comúnmente como causantes de ERGE. El alcohol y las bebidas con cafeína, como el café, y las bebidas gaseosas pueden causar reflujo. Los alimentos fritos y grasos, el chocolate, las frutas cítricas, las salsas de tomate, la menta y la menta también pueden ser sospechosos habituales, informa la Escuela de Medicina de Harvard. Los alimentos con proteínas, como la carne, el pollo, el pescado y los frijoles secos, no son necesariamente problemáticos a menos que sean altos en grasa. Evite los cortes grasos de carnes como costillas, costillas o filetes de hueso T y carne molida con más de 10 por ciento de grasa. También manténgase alejado de la piel de pollo o pavo, el tocino y las carnes procesadas con alto contenido de grasa, como los perros calientes. Su cuerpo le permitirá saber qué alimentos son problemáticos.

Intervenciones en el estilo de vida

Además de evitar la elección específica de alimentos, la Escuela de Medicina de Harvard recomienda otras intervenciones en el estilo de vida para ayudarlo a controlar la ERGE. Si tiene sobrepeso, considere perder algunas libras. El exceso de peso ejerce presión sobre el abdomen, que empuja el estómago hacia arriba y hace que el ácido regrese al esófago. También evite la ropa ajustada alrededor de su cintura, ya que ejerce una presión adicional sobre su abdomen. Evite las comidas grandes. Levantarse y moverse después de comer una comida también ayuda. Espere por lo menos dos o tres horas antes de acostarse o acostarse. Eleve la cabecera de su cama o duerma sobre una almohada grande en forma de cuña para ayudar a aliviar los síntomas durante la noche. Si fumas, deja de hacerlo. Fumar afecta la capacidad del esfínter esofágico inferior para funcionar correctamente.

Medicamentos

Los medicamentos también son una opción común en el tratamiento de la ERGE. Los tratamientos de venta libre incluyen antiácidos que aumentan el pH del ácido del estómago y medicamentos que reducen o bloquean la producción de ácido en el estómago, lo que permite que el tejido del esófago dañado se cure. Su médico puede recetarle medicamentos más fuertes o incluso una cirugía si otros tratamientos no logran mejorar su condición.

Este artículo es solo informativo y no pretende brindar asesoramiento médico.