El síndrome del intestino muerto
El síndrome del intestino muerto, o isquemia e infarto intestinal, es una afección médica que daña o mata el tejido en el tracto intestinal de una persona. Este trastorno resulta de una pérdida de flujo sanguíneo a los intestinos. Los médicos pueden corregir el síndrome del intestino muerto con un tratamiento que a menudo incluye cirugía. La isquemia e infarto intestinal no tratados pueden provocar una emergencia médica y muerte.
Síntomas
La isquemia intestinal aguda o el intestino muerto es una afección que se desarrolla rápidamente cuando el flujo de sangre hacia o desde los intestinos se bloquea y puede causar una leve hasta dolor severo en el abdomen, heces con sangre y evacuaciones intestinales que son frecuentes y urgentes. La isquemia intestinal crónica se desarrolla cuando el flujo de sangre intestinal se reduce durante un período prolongado de tiempo y puede causar cólicos abdominales después de comer, pérdida de peso inusual y dolor en el abdomen que aumenta durante un período de semanas.
Causas
Un intestino muerto puede desarrollarse por varias causas diferentes, incluida una hernia que enreda o mueve el intestino. El tejido cicatricial de cirugías pasadas puede atrapar los intestinos y causar un intestino muerto. Un coágulo de sangre o una obstrucción de la acumulación de colesterol puede bloquear una arteria que abastece los intestinos de una persona. Las personas con cáncer, enfermedad hepática o un trastorno de la coagulación sanguínea pueden desarrollar una obstrucción en las venas que transportan la sangre desde los intestinos y la sangre puede regresar a los intestinos.
Pruebas
Un médico puede realizar una o más exámenes médicos para ayudarlo a diagnosticar isquemia intestinal o intestino muerto, como una radiografía, para ver el área alrededor del tracto intestinal. Un ultrasonido puede proporcionar evidencia de disminución del flujo sanguíneo. Un procedimiento de colonoscopia proporciona imágenes detalladas del interior del intestino grueso mediante una pequeña cámara conectada a un tubo delgado que se inserta en el recto y se guía a través del colon.
Tratamiento
Los médicos generalmente tratan el síndrome del intestino muerto con cirugía para evitar obstrucciones en las arterias o para eliminar coágulos de sangre de los vasos sanguíneos cerca de los intestinos. Los médicos extirpan quirúrgicamente el tejido muerto y vuelven a unir las porciones del colon a ambos lados de una sección extraída. Las personas con esta afección pueden someterse a un procedimiento de angioplastia en el que se coloca un stent dentro de un vaso sanguíneo para mejorar el flujo sanguíneo. Los pacientes pueden recibir medicamentos para reducir la coagulación sanguínea, dilatar los vasos sanguíneos para mejorar el flujo sanguíneo o disolver los coágulos sanguíneos. Complicaciones
El bloqueo del flujo sanguíneo en el intestino puede hacer que crezca tejido cicatrizado y estrechar el intestino. Los médicos pueden extirpar quirúrgicamente el tejido cicatricial excesivo. Un paciente que tiene porciones muertas de su intestino extirpadas quirúrgicamente puede no tener suficiente tejido intestinal sano y puede requerir una ostomía. Los cirujanos extraen una sección del tracto intestinal y la conectan a una abertura en el abdomen durante un procedimiento de ostomía. Los pacientes con esta complicación expulsan los desechos corporales en una bolsa especial adherida a la abertura abdominal.