¿Qué es la perfusión periférica?
La palabra perfusión en medicina se refiere al suministro de sangre arterial llena de oxígeno y nutrientes a los tejidos a través de los vasos sanguíneos. La perfusión periférica se centra específicamente en el suministro de sangre a los tejidos periféricos, es decir, en las extremidades del cuerpo, como los pies y las manos. El monitoreo de la perfusión periférica en pacientes críticos permite que el personal médico y los cuidadores juzguen los efectos de los tratamientos y la intervención temprana en caso de que la perfusión periférica se evalúe como demasiado baja.
¿Por qué se mide?
Algunas veces durante la insuficiencia cardíaca y el shock, la sangre se redistribuye a los órganos vitales y se aleja de los tejidos periféricos, lo que produce una disminución de la perfusión periférica. Por lo tanto, la perfusión periférica baja puede ser un indicador temprano de insuficiencia cardíaca o shock y puede permitir una intervención temprana y vital.
Signos clínicos de baja perfusión periférica
Los signos clínicos incluyen piel pálida, moteada y pegajosa, en las extremidades.
Oxiometría de pulso
La perfusión periférica generalmente se mide cada dos a cuatro horas durante la estadía de un paciente en el hospital. Se puede medir como la cantidad de oxígeno en la sangre calculada como un porcentaje y se conoce como saturación de oxígeno. Esto se puede hacer usando una técnica llamada oxiometría de pulso. La oxiometría de pulso mide la saturación de oxígeno de la sangre usando luz infrarroja. El oxiómetro de pulso es generalmente un pequeño dispositivo colocado sobre un dedo conectado a un monitor médico para que el personal pueda controlar la saturación de oxígeno. Es una técnica utilizada en la mayoría de los pacientes críticamente enfermos y en aquellos con traumatismos, e incluso es un requisito obligatorio durante la cirugía en algunos países.
Calor periférico
Cuando el suministro de sangre disminuye, también lo hace la temperatura de la piel. Por lo tanto, el calor periférico también es un indicador importante de la perfusión periférica en niños y recién nacidos. El cuidador generalmente verificará la temperatura del pie a intervalos regulares al tocarlo.
Investigación del calor periférico en adultos
Los estudios en adultos que observan la temperatura del dedo del pie como una medida de perfusión periférica han demostrado una correlación directa entre los dos. De acuerdo con la revista Continuous Nurse Education, un estudio de 50 adultos demostró que existe una correlación directa entre la temperatura del dedo del pie y la perfusión periférica y que incluso fueron capaces de predecir las tasas de mortalidad basadas en la medición temprana de la temperatura del dedo del pie.
Periférico Investigación sobre el calor en niños
El mismo artículo continúa hablando sobre la evidencia del calor periférico como medida de la perfusión periférica en niños y afirma que, si bien la literatura es limitada, se encontraron resultados similares a los de los estudios en adultos.