Los mejores difusores de aceites esenciales

Los aceites esenciales se han utilizado en la aromaterapia para lograr la relajación y tratar los problemas de salud durante siglos. Los profesionales de la aromaterapia creen que la inhalación de ciertos olores provoca cambios en el sistema límbico (el área más interna del cerebro) y afecta la función de los órganos y la mente.

La aromaterapia también se puede usar para crear un ambiente relajante y relajante con aromas naturales. Los difusores de aceites esenciales se utilizan para esparcir el aroma del aceite en una habitación.

1. Difusores de láminas

Los difusores de láminas no solo liberan un aroma en toda la habitación, sino que a menudo sirven como atractivas piezas decorativas. Un difusor de lámina es un jarrón o jarrón lleno de un aceite portador como el aceite de oliva o de almendra. Agregue el aceite esencial o la mezcla de aceites de su elección en el frasco y coloque varias cañas de ratán altas y delgadas en el aceite.

En 30 minutos, el aceite sube por los capilares de las cañas y el aroma se dispersa gradualmente dentro del Aire. Un difusor de láminas puede oler una habitación durante varias horas o varios días, dependiendo de la fragancia utilizada. Puede encontrarlos en tiendas como Pier1 o Cost Plus World Market.

2. Nebulizadores de aceites esenciales

Los profesionales de la aromaterapia suelen preferir los nebulizadores de aceites esenciales porque no usan calor (consulte a continuación para obtener más información sobre difusores de calor).

La mayoría de los nebulizadores consisten en una bomba que fuerza el aire en el aceite y luego a través de una serie de tubos retorcidos. El aceite se rompe en pequeñas gotas similares a un aerosol. Los nebulizadores (como el AroMini de AromaTech, ilustrado arriba) pueden usarse para perfumar una habitación o pueden usarse solo para inhalar unas cuantas respiraciones de aceite esencial puro.

El AroMini incluso le permite controlarlo desde su Llame por teléfono y configúrelo para que continúe en los horarios programados durante todo el día, de modo que tenga un recordatorio relajante para respirar de manera profunda y limpia. Pruebe aromas como la vainilla de lavanda o la mezcla Unwind para ayudar a disipar el estrés y la ansiedad.

Aunque estos dispositivos pueden ser más caros que las otras opciones en esta lista, son la mejor y más rápida manera de obtener la esencia pura. de sus aceites en el aire ambiente para que pueda respirar profundamente su aroma y relajar el estrés.

3. Difusores de calor

Los métodos de calor disponibles en el mercado, también conocidos como calentadores de aceites esenciales, generalmente implican una luz de té colocada debajo de una olla pequeña, piedra hueca u otro recipiente (como este de Yankee Candle). La vela calienta el recipiente, que libera el aroma en el aire.

Los difusores eléctricos son más seguros de usar que los difusores de vela, aunque no tienen el mismo ambiente. Un difusor eléctrico puede ser un pequeño dispositivo que se encuentra en un enchufe de pared (como ScentFill), o puede ser una máquina que contiene un plato que se calienta y difunde el olor (como eWarm de SpaRoom).

Aunque el calor Puede destruir los componentes terapéuticos de algunos aceites esenciales como la rosa o el jazmín, es una forma muy efectiva de difundir un aroma de forma rápida y prolongada. Si desea una alternativa de precio similar sin el calor, pruebe un difusor de ventilador como el AromaCube de AromaTech.

4. Difusores de bricolaje

Si está en un apuro y quiere algo de aromaterapia lo antes posible, intente crear su Método de difusión propio. A veces, un difusor simple es la forma más rápida y fácil de dispersar un aceite esencial en una habitación. Aquí hay dos ideas de bricolaje:

Para un área muy pequeña, como un cubículo de oficina, coloque una o dos gotas de aceite en un pañuelo de papel o una bola de algodón.

Para una habitación más grande , llena un recipiente con dos tazas de agua hirviendo y agrega unas gotas de aceite. El aroma se liberará con el vapor.

Ambos métodos son efectivos y económicos, pero el inconveniente es que el aroma no dura mucho y debe ser reemplazado con frecuencia.

También puedes crear tu propio calor. difusor encendiendo una vela, dejándola arder durante varios minutos y luego apagándola. Mientras la cera aún se derrite, agregue unas gotas de aceite y vuelva a encender la vela.