El sodio y su salud El sodio, comúnmente conocido como sal, es un elemento alcalino que se encuentra naturalmente en la mayoría de los alimentos y juega un papel esencial para mantener la salud y el funcionamiento óptimos de su cuerpo. Las mujeres adultas no deben consumir más de 2,300 miligramos de sodio por día, de acuerdo con las Guías Alimentarias para los Estadounidenses, 2010. La mayoría de las mujeres, sin embargo, consumen más que la recomendación diaria, con consecuencias negativas para su salud. Sodio y salud

El sodio es una parte necesaria de su dieta diaria, y su cuerpo necesita al menos 1,500 miligramos por día para funcionar normalmente, según los Institutos de Medicina. El sodio ayuda al cuerpo a mantener un equilibrio adecuado de líquidos y regula tanto la presión arterial como el volumen sanguíneo. El mineral ayuda al sistema nervioso a transmitir los impulsos nerviosos y afecta la contracción y la relajación de los músculos.

Sus riñones procesan y almacenan un equilibrio óptimo de sodio. Retienen sodio cuando sus niveles dietéticos son demasiado bajos y excretan sodio a través de la orina cuando los niveles son demasiado altos.

Consumo excesivo de sodio

Las mujeres estadounidenses consumen mucho más que la cantidad recomendada de sodio por día. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, el estadounidense promedio de más de 2 años de edad consume 3436 mg al día. Cuando se come demasiado sodio, se fuerza el funcionamiento adecuado de los riñones, lo que puede provocar un aumento de la presión arterial, una condición conocida como hipertensión. Debido a que el sodio retiene agua, el consumo excesivo conduce a un volumen elevado de sangre que aumenta la presión sobre su corazón para bombear sangre a través de las arterias. La hipertensión es un factor de riesgo importante para las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares, según lo señala la investigación de la American Heart Association como las principales causas de muerte para las mujeres estadounidenses.

Fuentes de sodio

El sodio dietético generalmente proviene de tres fuentes principales . Los alimentos procesados, como cenas preparadas, sopas, carnes frías y comidas rápidas contienen grandes cantidades de sal añadida. El sodio también se encuentra naturalmente en las verduras, productos lácteos, carne y mariscos. Si bien estos alimentos contienen niveles más bajos de sodio que los procesados, el consumo excesivo de sodio natural puede ser perjudicial para la salud. La tercera fuente principal de sodio es la sal en su gabinete de cocina o en su mesa de comedor.

Cómo encontrar un equilibrio saludable

Reduzca su consumo de sodio al comer más frutas y verduras frescas. Coma alimentos ricos en potasio para contrarrestar los efectos negativos del sodio en su cuerpo, recomienda la American Heart Association. Los alimentos ricos en potasio incluyen espinacas, plátanos, productos lácteos y batatas. Sazone su comida con hierbas, especias y limón sin sal, en lugar de utilizar el salero.

Una nota de precaución

Las Directrices dietéticas para los estadounidenses son recomendaciones generales. Si tiene hipertensión u otra afección médica, consulte a su médico para obtener la cantidad diaria de sodio adecuada para sus necesidades de salud.