¿Cómo se metaboliza la glucosa?

Usted absorbe la glucosa, un azúcar simple que se encuentra en las plantas, directamente en el torrente sanguíneo, donde actúa como la fuente de combustible de su cuerpo. Sin la capacidad de convertir la glucosa en energía de manera rápida y eficiente, no estaría en buen estado de salud. Es muy importante que su sistema de metabolismo energético funcione de manera eficiente.

Metabolism Begins

El proceso de metabolismo comienza con la digestión. Los monosacáridos se absorben en el torrente sanguíneo al entrar en el intestino delgado. Para controlar el azúcar en la sangre, su cuerpo tiene tres hormonas: glucagón, insulina y epinefrina. La insulina, que el páncreas secreta cuando aumentan los niveles de azúcar en la sangre, ayuda a lo largo de la transferencia de glucosa a las células. El metabolismo de la glucosa se centra principalmente en los músculos y el hígado, que reciben más glucosa que los otros órganos porque tienen receptores de insulina específicos en su superficie, de modo que la insulina se puede unir a ellos, lo que fomenta la entrada y el uso de la glucosa en estas células. Glucogenolisis

Al entrar en el hígado y los músculos, la glucosa se transforma en glucógeno por el proceso de la glucogénesis. El glucógeno permanece en su hígado y músculos hasta que sus niveles de glucosa están bajos y necesita energía. En este momento, las hormonas epinefrina y glucogón se liberan para estimular la conversión de glucógeno en glucosa en un proceso llamado glucogenólisis. Una vez que la glucosa ingresa a las células, se quema para producir energía y produce calor. Este proceso también crea trifosfato de adenosina, o ATP, una molécula que libera energía cuando la célula la necesita. La energía se usa para muchos procesos metabólicos y se considera la moneda de energía universal para el metabolismo.

Metabolismo aeróbico

Hay dos tipos de metabolismo de la glucosa: el metabolismo aeróbico, que es con oxígeno, y el metabolismo anaeróbico, que es sin oxigeno Durante el metabolismo aeróbico, el oxígeno utilizado proviene de cuerpos diminutos dentro de la célula llamados mitocondrias para oxidarse completamente. Las células musculares consumen la mayor cantidad de energía durante este proceso, y debido a que contienen mitocondrias, el proceso es simple y rápido cuando hay oxígeno presente. Este proceso incluye el ciclo de Krebs, que produce dióxido de carbono y ATP. Este químico proporciona a las células la energía necesaria para la síntesis de proteínas a partir de aminoácidos y la replicación del ADN.

Metabolismo anaeróbico y agotamiento del glucógeno.

Durante el ejercicio intenso o en momentos de esfuerzo extremo, el nivel de oxígeno en el músculo. Las células pueden caer demasiado bajas. Si esto sucede, el proceso continúa con el metabolismo anaeróbico. La desventaja de quemar glucosa para obtener energía sin oxígeno es la producción de ácido láctico. Se sabe que la sustancia causa dolor en los músculos cuando se produce una "acumulación de ácido láctico". Otro evento que ocurre cuando el glucógeno se ha agotado en los músculos y el hígado es "golpear la pared". Este es un mecanismo de defensa natural para el cuerpo y previene el daño permanente durante el esfuerzo extremo al disminuir los sistemas clave necesarios para mantener la contracción muscular. Cuando el cuerpo se ralentiza y el oxígeno se vuelve disponible, el lactato vuelve a convertirse en piruvato. Esto permite que se reanude el metabolismo aeróbico y que el cuerpo se recupere del evento extenuante.