Cálculos biliares y diverticulitis
Aunque la enfermedad de cálculos biliares y la diverticulitis generalmente comienzan con diferentes síntomas, en raras ocasiones, pueden causar un tipo similar de dolor, lo que resulta en un dilema de diagnóstico para su médico. En la mayoría de los casos, los signos y síntomas son lo suficientemente diferentes como para permitir un diagnóstico y tratamiento rápidos y directos. La diverticulitis es una inflamación de las pequeñas bolsas de su intestino grueso, también conocida como su colon. Los cálculos biliares son formaciones de bilis endurecida en forma de guijarros localizadas en la vesícula biliar, que se encuentran debajo de la caja torácica derecha.
La enfermedad de cálculos biliares, llamada colecistitis aguda, puede aparecer primero con un dolor repentino y severo centrado debajo de la caja torácica derecha. A menudo con dolor de espalda asociado, náuseas y vómitos y fiebre. La enfermedad de los cálculos biliares también puede ser una afección en curso llamada colecistitis crónica, que puede empeorar después de comer una comida grasa. Un cirujano puede examinarlo y determinar si su vesícula biliar es la fuente probable de sus síntomas. Si es así, generalmente es necesaria una hospitalización. Es posible que le administren antibióticos y, en última instancia, que le extraigan la vesícula biliar durante un procedimiento conocido como colecistectomía laparoscópica. Una vez que se haya retirado su vesícula biliar enferma y se haya recuperado, no debería experimentar más problemas.
La diverticulitis, o una inflamación de las bolsas del colon, produce un dolor que varía de leve a intenso, que generalmente ocurre en el lado izquierdo de su abdomen. Una diverticulitis perforada o rota puede hacer que su abdomen se vuelva rígido. Su cirujano de colon y recto, anteriormente llamado proctólogo, o su cirujano general lo evalúa y generalmente comienza el tratamiento con antibióticos. La diverticulitis rara vez requiere hospitalización. En raras ocasiones, puede ser necesaria una operación, especialmente si ha experimentado una perforación que permite el libre flujo de los contenidos de su colon hacia la cavidad abdominal general. La diverticulitis generalmente es una enfermedad de personas mayores.
La educación y la atención a sus síntomas es el curso más inteligente y la forma más fácil de evitar las complicaciones de cualquiera de las dos enfermedades. El dolor asociado con estas afecciones generalmente lo obliga a consultar a su médico, quien puede derivarlo a un especialista en colon y recto para la diverticulitis o a un cirujano general para la enfermedad de la vesícula biliar. Busque asesoramiento médico con anticipación, no tenga miedo de llamar cuando necesite ayuda y sea informado sobre el proceso de su enfermedad.
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