Cómo quitar la cinta quirúrgica
La cinta quirúrgica se usa comúnmente en hospitales y centros de atención médica para proteger y curar heridas. Es muy duradero y tiene un fuerte respaldo adhesivo para evitar que la cinta se caiga prematuramente. A veces puede ser difícil quitar la cinta debido al adhesivo, por lo que algunos artículos comunes del hogar pueden usarse para que el proceso sea indoloro.
Cómo quitar la cinta quirúrgica
Saturar una toalla de papel en alcohol para frotar.
Frote la cinta quirúrgica que va a quitar con la toalla de papel saturada en alcohol. El alcohol comenzará a disolver el soporte adhesivo de la cinta que está contra su piel.
Levante una esquina de la cinta quirúrgica con la uña.
Comience a tirar de la cinta hacia arriba. Mientras tira de la cinta, coloque la toalla de papel saturada con alcohol sobre la piel donde estaba la esquina de la cinta.
Continúe tirando de la cinta hacia arriba y afuera mientras frota la toalla de papel Una vez que se haya retirado la cinta quirúrgica, frote la piel con más alcohol para eliminar cualquier adhesivo que aún pueda quedar sobre su piel.
Sugerencia
Tenga cuidado de no frotar alcohol en las heridas que pueda tener, ya que esto podría causar quemaduras y posiblemente dañar las células en cicatrización de la herida.
Advertencias
No use alcohol de frotar alrededor de sus ojos, nariz o boca. Si se salpica en los ojos, lávelos con agua durante 15 minutos y llame a su médico. Si se ingiere accidentalmente, visite su sala de emergencias local de inmediato.
Cosas necesarias
Toalla de papel
Alcohol para frotar