Cómo ayudar a un niño con ansiedad por los gérmenes
Un niño con miedo a los gérmenes puede trabajar duro para evitarlos y tratar de evitar cualquier amenaza. El miedo del niño a los gérmenes puede ser irracional y excesivo, informa la Asociación de Trastornos de Ansiedad de América, o ADAA. Si el miedo de los gérmenes a un niño se vuelve excesivo, puede interrumpir sus rutinas diarias, limitar su eficiencia e impactar su autoestima porque otros niños notarán su comportamiento anormal. El miedo excesivo puede incluso convertirse en una fobia más severa de gérmenes.
Educar al niño sobre cómo protegerse contra los gérmenes. Según Kid ’ sHealth.org, los gérmenes se propagan a través de estornudos, toses, respiraciones, sudor, saliva y sangre, pero también se pueden propagar cuando una persona toca un objeto contaminado y luego toca a otra persona. Enseñe los pasos necesarios para evitar la propagación de gérmenes.
Kid ’ sHealth.org, señala que una de las formas más efectivas de reducir las posibilidades de contraer gérmenes es lavar su Manos con agua y jabón. Ayude al niño a comprender cuándo debe lavarse las manos: después de usar el baño; antes de comer y preparar la comida; cuando juega con un animal o juega afuera; y después de interactuar con alguien que está enfermo. Tómese el tiempo para enseñarle a lavarse las manos correctamente.
Enseñe a su hijo cómo una dieta saludable puede ayudar a su cuerpo a combatir los gérmenes no deseados. El cuerpo humano es fuerte y eficiente, especialmente cuando se le proporciona la nutrición y el ejercicio físico adecuados. Cuando un niño consume una dieta saludable y hace la cantidad adecuada de ejercicio, está fortaleciendo la capacidad de su cuerpo para combatir los gérmenes infecciosos.
Proporcione al niño el control sobre los gérmenes . Dale los pasos que puede tomar para reducir las posibilidades de que su cuerpo se vea afectado por los gérmenes. Enséñele cómo comer sano consumiendo elementos como frutas, vegetales, granos enteros y proteínas magras. Ayúdale a hacer ejercicio regularmente. Enséñele cómo el ejercicio fortalece su sistema inmunológico y la capacidad de combatir los gérmenes no deseados.
Haga que el niño hable con un profesional de salud mental que se especialice en terapia de exposición. Según HelpGuide.org, la terapia de exposición se realiza al exponer al niño en un entorno seguro y controlado a las situaciones u objetos que teme. Las exposiciones generalmente ocurrirán con el tiempo y aumentarán de intensidad a medida que el niño pueda manejar más.
La terapia de exposición le permite al niño obtener más control sobre sus miedos y reducir sus ansiedades , señala HelpGuide.org. Hable con el médico del niño acerca de una derivación a un terapeuta que use terapia de exposición. Ayude a su hijo a ser optimista sobre la terapia y ofrezca su apoyo continuo. Recuérdele a su hijo lo que aprendió en terapia cada semana.