Lo que tu aliento puede decir sobre la salud
Quitaesmalte acetónico o de uñas: Un fuerte olor a acetona también puede ser un signo de cetoacidosis diabética (CAD). Este olor proviene de la descomposición de la grasa para obtener energía en lugar de glucosa.
Amoníaco: El aliento a amoníaco puede ser un signo de enfermedad renal. Cuando los riñones no funcionan correctamente, no pueden eliminar la urea y otros productos de desecho de la sangre, lo que puede provocar una acumulación de amoníaco en el cuerpo.
A pescado: El aliento a pescado puede ser un signo de trimetilaminuria (TMAU), un trastorno genético que resulta de la incapacidad del cuerpo para descomponer ciertos compuestos.
Huevos podridos: El olor a huevo podrido en el aliento puede indicar problemas hepáticos o digestivos. Cuando el hígado está dañado, no puede procesar los compuestos de azufre adecuadamente, lo que provoca un fuerte olor a azufre en el aliento.
Ajo o Cebolla: Comer alimentos como el ajo o la cebolla puede provocar un olor fuerte en el aliento, que puede confundirse con un signo de un problema médico.
Agrio o Vinagre: El aliento agrio o avinagrado puede ser causado por reflujo ácido o enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), una afección en la que los ácidos del estómago regresan al esófago.
Metálico: El aliento metálico a menudo se asocia con sangre en la saliva, a menudo debido a una mala higiene bucal o a una enfermedad de las encías.
Recuerda que estas son indicaciones generales, y siempre es imprescindible consultar a un profesional sanitario para un diagnóstico y tratamiento adecuado. Si nota algún cambio en el olor o sabor de su aliento que le preocupa, no dude en comunicarse con su médico o dentista.