¿Cómo ayuda refrescar el aire en los sacos a mantener un gradiente de difusión pronunciado?
Refrescar el aire en los sacos ayuda a mantener un gradiente de difusión pronunciado al introducir oxígeno nuevo en los alvéolos y eliminar el dióxido de carbono. Este proceso asegura que haya una mayor concentración de oxígeno en los alvéolos que en los capilares pulmonares, creando un gradiente de difusión pronunciado para que el oxígeno pase de los alvéolos al torrente sanguíneo. A medida que el oxígeno se difunde desde los alvéolos hacia los capilares, el dióxido de carbono se difunde desde los capilares hacia los alvéolos. Al refrescar continuamente el aire de los sacos, la concentración de dióxido de carbono en los alvéolos se mantiene baja, creando un gradiente de difusión pronunciado para que el dióxido de carbono pase de la sangre al aire alveolar.