¿Por qué es necesario reducir los niveles de azúcar en sangre en un paciente con DM a punto de someterse a una intervención quirúrgica?

Reducir los niveles de azúcar en sangre en un paciente con diabetes mellitus (DM) antes de someterse a una cirugía es crucial por varios motivos:

1. Prevención de infecciones del sitio quirúrgico: Los niveles altos de azúcar en sangre pueden afectar el sistema inmunológico del cuerpo y aumentar el riesgo de infecciones en el sitio quirúrgico. Mantener el control de la glucosa en sangre ayuda a reducir la probabilidad de infección y promueve la curación óptima de las heridas.

2. Curación de heridas mejorada: La diabetes puede afectar la capacidad del cuerpo para curar heridas. Los niveles elevados de azúcar en sangre pueden retrasar el cierre de la herida, aumentar el riesgo de infección y provocar una reparación deficiente de los tejidos. Al controlar el azúcar en sangre, se mejora la cicatrización de heridas y se reducen las posibilidades de complicaciones.

3. Riesgo reducido de complicaciones posoperatorias: Los niveles de azúcar en sangre no controlados pueden provocar diversas complicaciones posoperatorias, que incluyen:

* Cetoacidosis diabética (CAD): Una afección potencialmente mortal caracterizada por niveles altos de azúcar en sangre, niveles elevados de cetonas y deshidratación. La CAD puede desarrollarse rápidamente en pacientes con diabetes no controlada, especialmente durante períodos de estrés, como una cirugía.

* Hipoglucemia: Una condición en la que los niveles de azúcar en la sangre bajan demasiado. La hipoglucemia puede ocurrir durante o después de la cirugía, especialmente si se usa insulina u otros medicamentos para reducir la glucosa.

* Retraso en la cicatrización de heridas: Como se mencionó anteriormente, los niveles altos de azúcar en sangre pueden afectar la cicatrización de las heridas, lo que provoca un retraso en la recuperación.

* Mayor riesgo de infección: Los niveles de azúcar en sangre no controlados pueden debilitar el sistema inmunológico, haciendo que los pacientes sean más susceptibles a infecciones después de la cirugía.

4. Optimización de la oxigenación de los tejidos: Los niveles altos de azúcar en sangre pueden dañar los vasos sanguíneos pequeños y afectar la circulación, lo que lleva a una reducción de la oxigenación de los tejidos. Mantener un nivel normal de azúcar en sangre ayuda a garantizar un suministro adecuado de oxígeno a los tejidos, lo que promueve una recuperación más rápida y reduce el riesgo de complicaciones.

5. Cumplimiento de los cuidados postoperatorios: Los pacientes con niveles de azúcar en sangre bien controlados tienen más probabilidades de cumplir con las instrucciones y los medicamentos posoperatorios, lo que genera mejores resultados y reduce el riesgo de complicaciones.

Por lo tanto, lograr un control óptimo del azúcar en sangre en pacientes con DM antes de la cirugía es esencial para minimizar riesgos, prevenir complicaciones y garantizar un resultado quirúrgico exitoso. A menudo es necesario un control estricto de los niveles de glucosa en sangre, ajustes de la terapia con insulina y modificaciones en la dieta para mantener el azúcar en sangre dentro del rango objetivo.