Cómo pueden los niños evitar los desencadenantes del síndrome de Dravet
- Sueño regular :Tener una rutina estricta a la hora de acostarse es especialmente importante para los niños con síndrome de Dravet. Ayuda a mantener la coherencia en su horario de sueño y minimiza las posibilidades de sufrir convulsiones causadas por la falta de sueño.
- Reducir la estimulación :Los entornos sobreestimulantes pueden provocar convulsiones. Se deben evitar en la medida de lo posible los sonidos fuertes, las luces brillantes y los cambios bruscos de rutina. Por ejemplo, puede ser beneficioso cubrir o atenuar las luces brillantes, usar tapones para los oídos en situaciones excesivamente ruidosas y mantener un ambiente tranquilo en el hogar.
- Evitar la hipertermia :La fiebre es un desencadenante muy común de las convulsiones. Los métodos de enfriamiento, como pasar una esponja con agua tibia o colocar una toalla húmeda y fría sobre la frente del niño, pueden ayudar a prevenir o controlar la fiebre. También puede ser útil administrar la dosis adecuada de medicamento para controlar la fiebre lo antes posible.
- Nutrición y Dieta :Una dieta cetogénica es eficaz para reducir la frecuencia de las convulsiones en aproximadamente la mitad de los niños con síndrome de Dravet y una dieta Atkin modificada (MAD) también puede ser útil. Otras opciones incluyen la dieta paleo, la dieta sin gluten o una dieta mediterránea modificada. Consulte siempre a un dietista o nutricionista antes de implementar cualquier cambio en la dieta para asegurarse de que su hijo obtenga el equilibrio adecuado de nutrientes.