¿Puede un niño de 14 años tener gota?

Si bien es poco común, es posible que un niño de 14 años desarrolle gota. La gota generalmente se asocia con adultos mayores, especialmente hombres, y a menudo se relaciona con factores como la obesidad, la presión arterial alta y ciertas afecciones médicas. Sin embargo, en casos raros, las personas más jóvenes, incluidos los adolescentes, pueden experimentar gota. Aquí hay algunos factores que pueden contribuir a la gota en los adolescentes:

1. Antecedentes familiares:si un adolescente tiene antecedentes familiares de gota, es más probable que desarrolle la afección. La genética juega un papel en la regulación del metabolismo del ácido úrico y heredar ciertas variaciones genéticas puede aumentar el riesgo de gota.

2. Obesidad:El sobrepeso o la obesidad es un factor de riesgo conocido para la gota. El exceso de peso corporal puede provocar niveles más altos de ácido úrico en el torrente sanguíneo.

3. Dieta:Una dieta rica en alimentos ricos en purinas, como carnes rojas, vísceras y ciertos mariscos (por ejemplo, sardinas y anchoas), puede contribuir a la gota. Las purinas se descomponen en ácido úrico durante la digestión y consumir cantidades excesivas puede anular la capacidad del cuerpo para eliminarlo de manera efectiva.

4. Condiciones médicas:Ciertas condiciones médicas, como enfermedad renal, leucemia y ciertos trastornos genéticos, también pueden aumentar el riesgo de gota en personas más jóvenes.

5. Medicamentos:algunos medicamentos, como los diuréticos (utilizados para la retención de líquidos) y la aspirina (en dosis altas), pueden interferir con la eliminación del ácido úrico y potencialmente contribuir a la gota.

Si un niño de 14 años experimenta dolor repentino, hinchazón, enrojecimiento y calor en las articulaciones, especialmente en el dedo gordo del pie, es importante consultar a un profesional de la salud. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden ayudar a prevenir complicaciones y reducir el riesgo de ataques de gota recurrentes.