El desequilibrio proteico es raro en personas sanas de países desarrollados, que tienen fácil acceso a cantidades adecuadas de alimentos que contienen proteínas de alto valor nutricional. Puede surgir cuando la disponibilidad de alimentos es inadecuada, como en algunos países en desarrollo; en personas con dietas muy restringidas; y en personas con ciertas enfermedades gastrointestinales y otras condiciones médicas que afectan la absorción de nutrientes.