¿A qué se debe el aumento del trastorno depresivo en los últimos 50 años?

No existe un consenso claro entre los profesionales e investigadores de la salud mental con respecto a una única explicación definitiva para el aumento percibido en el diagnóstico de depresión en los últimos 50 años. Sin embargo, hay varios factores potenciales que se han estudiado y propuesto:

Mayor concientización:

Una posible explicación es una mayor conciencia sobre los problemas de salud mental. Gracias a los esfuerzos de las organizaciones y campañas de salud mental, ha habido un aumento significativo en el conocimiento y la comprensión públicos sobre la depresión. Es probable que esta conciencia haya contribuido a que más personas busquen ayuda y sean diagnosticadas.

Cambios de diagnóstico:

Los cambios en los criterios de diagnóstico de la depresión a lo largo del tiempo también pueden haber influido. Los criterios de diagnóstico de los trastornos de salud mental, incluida la depresión, los establece la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (APA) a través de su Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM). Las revisiones del DSM a lo largo de los años han resultado en ocasiones en criterios más amplios o más inclusivos para diagnosticar la depresión, lo que ha llevado a un aparente aumento de casos.

Factores de estilo de vida:

Los cambios en el estilo de vida, las normas sociales y las presiones sociales han tenido un impacto significativo en la salud mental. Factores como el aumento del estrés, las jornadas laborales más largas, la reducción de la actividad física y los patrones de sueño alterados se han asociado con un mayor riesgo de depresión.

Redes sociales y tecnología:

El aumento del uso de las redes sociales y la tecnología, especialmente entre las generaciones más jóvenes, ha transformado las interacciones y la comunicación sociales. La exposición constante a estándares de belleza poco realistas, las comparaciones excesivas en línea y el ciberacoso pueden contribuir a una baja autoestima y una autopercepción negativa, lo que potencialmente contribuye a la depresión.

Condiciones médicas y medicación:

Ciertas condiciones médicas y medicamentos pueden provocar depresión como efecto secundario. Con los avances en la atención médica y una mayor esperanza de vida, la prevalencia de enfermedades crónicas también ha aumentado, lo que lleva a un posible aumento de los casos de depresión.

Factores genéticos y biológicos:

Las investigaciones han sugerido que los factores genéticos y biológicos pueden desempeñar un papel en la depresión. Podría haber un componente genético que haga que ciertos individuos sean más susceptibles a la depresión o más sensibles a los factores estresantes ambientales.

Mayor accesibilidad a la atención:

Otro factor es la mayor accesibilidad a los servicios de atención de salud mental. Con más recursos disponibles, como clínicas de salud mental, líneas directas y opciones de terapia en línea, puede resultar más fácil para las personas buscar ayuda para problemas de salud mental.

Cambios culturales en las actitudes hacia la salud mental:

Las actitudes sociales hacia las enfermedades mentales han ido cambiando con el tiempo, volviéndose más tolerantes y menos estigmatizantes. Este cambio cultural puede alentar a más personas a reconocer sus problemas de salud mental y buscar ayuda profesional.

Es probable que sea una combinación de estos factores, más que una sola causa, lo que ha llevado al aumento percibido del trastorno de depresión en los últimos 50 años. Es importante señalar que, si bien puede haber más personas diagnosticadas con depresión, esto no necesariamente indica un aumento exponencial en la prevalencia del trastorno. Podría simplemente reflejar un mejor reconocimiento, diagnóstico y presentación de informes.