Signos de un dentista malo

Si bien muchas personas estarían de acuerdo en que mantener una buena salud dental requiere visitas dentales periódicas, algunos se muestran reacios a programar una cita dental porque temen los procedimientos, los gastos e incluso el dentista. Tener una experiencia negativa en el dentista puede agravar este problema, dejando una asociación persistente con el dentista que puede evitar que las personas regresen. Sin embargo, saber qué es lo que hace que un dentista sea malo puede ayudarlo en el proceso de selección del dentista. Muéstreme el dinero

Sea sospechoso si el personal gasta una cantidad excesiva de su tiempo de cita detallando varios procedimientos costosos, luego solicita el pago en su totalidad antes de que el dentista comience a trabajar. En el sitio web "Elegir un dentista", Stuart A. Green, de DDS-FAGD, dice: "Su dentista debe estar dispuesto a discutir las tarifas y los planes de pago por adelantado". La falta de disposición para establecer acuerdos de pago comunica una falta de preocupación para los pacientes y Es a menudo un signo de una mala práctica dental. Establecer una relación recíproca positiva centrada en pacientes que reciben atención dental de calidad y asequible debe ser el enfoque principal de cualquier visita dental. Trabajo innecesario

Tenga cuidado si el dentista apenas mira su cuestionario previo a la cita, no lo hace Considere sus restricciones de presupuesto y descarta sus preocupaciones. Además, es una mala señal si el dentista recomienda procedimientos costosos, como endodoncias o descamación, cada vez que visite, a menos que, por supuesto, tenga una enfermedad importante de las encías u otros problemas de salud diagnosticados que justifiquen dichos procedimientos. Si el dentista se muestra perturbado cuando cuestiona la necesidad de llevar a cabo los procedimientos recomendados, puede ser recomendable buscar un nuevo dentista.

Inquietud innecesaria

Un buen dentista podrá administrar el tratamiento de manera suave Manera que minimiza el dolor de un paciente. Por otro lado, un mal dentista será innecesariamente áspero al realizar la atención de rutina, como limpiar los dientes o administrar inyecciones, lo que resultará en un dolor innecesario para el paciente. Como resultado, es posible que los pacientes no vuelvan al trabajo completo iniciado y se resistan a hacer citas dentales futuras, lo que pone en riesgo su salud.

Shoddy Work

Un mal dentista realizará un trabajo de mala calidad. En lugar de durar por años, los empastes pueden caerse, las carillas pueden desprenderse y las coronas se soltarán poco después de que se complete el trabajo. La primera recomendación de algunos dentistas malos cuando un paciente se queja de un problema con un diente puede ser tirar de él.

Un mal ambiente

Una oficina polvorienta, alfombras sucias y equipos de apariencia opaca crean la impresión de que El medio ambiente no es estéril. Un personal descortés también contribuye a crear un ambiente negativo que refleja pobremente la práctica. Un dentista que mantiene a los pacientes esperando mucho tiempo después de sus citas programadas y que no le asigna el tiempo suficiente para completar los procedimientos crea una mala impresión general y contribuye a crear un ambiente que muestra una falta de respeto por los pacientes.