Síntomas de descompensación cardíaca
La insuficiencia cardíaca es una condición crónica en la que una anomalía estructural o enfermedad limita la capacidad del corazón para bombear una cantidad adecuada de sangre a través del cuerpo. Los medicamentos aumentan la función cardíaca en las personas con insuficiencia cardíaca, también conocida como insuficiencia cardíaca. La descompensación cardíaca es un empeoramiento repentino de los síntomas asociados con la insuficiencia cardíaca. Esta situación puede ocurrir debido a la progresión de la insuficiencia cardíaca o a un cambio en las circunstancias, como la falta de dosis de medicamentos o el desarrollo de una infección o anemia.
Característica de la insuficiencia respiratoria
Pacientes con insuficiencia cardíaca Tener algún grado de falta de aliento. Las personas con enfermedad leve experimentan este síntoma solo con un esfuerzo físico sustancial, mientras que las personas con enfermedad grave pueden quedarse sin aliento con una actividad mínima. El aumento de la dificultad respiratoria asociada con un menor esfuerzo físico que el experimentado anteriormente es un síntoma común de la descompensación cardíaca. El síntoma se produce debido a la falta de oxígeno en los tejidos como resultado del flujo sanguíneo lento y la fuga de líquido a los sacos de aire del pulmón. aumento de la presión en los vasos sanguíneos que transportan la sangre desde los pulmones hasta el corazón. Bajo la influencia del aumento de la presión, el líquido se fuga de los vasos sanguíneos a los tejidos pulmonares, congestionando los sacos de aire. La presencia de líquido en los sacos de aire, o edema pulmonar, comúnmente provoca sibilancias y tos. La tos asociada con el edema pulmonar se empeora de forma característica al acostarse, lo que aumenta aún más la presión en los vasos sanguíneos del pulmón. La tos asociada con el edema pulmonar a menudo produce moco espumoso, que puede estar teñido de sangre.
Fatiga Agravante
La descompensación cardíaca indica una disminución en el volumen de sangre rica en oxígeno que llega a los tejidos del cuerpo. El oxígeno alimenta las necesidades energéticas del cuerpo; La menor disponibilidad de oxígeno compromete los tejidos del cuerpo; Capacidad para alimentar las actividades metabólicas normales. Esta situación se manifiesta como una sensación generalizada de fatiga o cansancio. Las personas con una disminución repentina de la función cardíaca suelen experimentar un empeoramiento de la fatiga.
Edema tisular
El flujo sanguíneo lento debido a la descompensación cardíaca puede aumentar la acumulación de sangre y la presión en los tejidos corporales más allá de los pulmones. La fuga de líquido ocurre en esta circunstancia, causando hinchazón o edema en diversos tejidos corporales. El edema aumentado en la parte inferior de las piernas, pies y manos ocurre comúnmente con la descompensación cardíaca. El líquido también puede acumularse en el abdomen, causando distensión abdominal y un aumento asociado en el peso corporal. La acumulación de líquido en la cavidad torácica alrededor de los pulmones, llamada derrame pleural, agrava de manera característica la falta de aire y el hambre de aire.