Trastornos del sistema nervioso periférico
Los dos sistemas nerviosos principales del cuerpo son los sistemas central y periférico. Los trastornos del sistema nervioso periférico incluyen todas las vías nerviosas que se encuentran fuera del cerebro y la médula espinal. Los síntomas de la enfermedad incluyen debilidad muscular, parálisis y disfunción sensorial. Las causas del daño a los nervios periféricos incluyen genética, infecciones, traumatismos y trastornos autoinmunes.
Enfermedad de Charcot-Marie-Tooth
La enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, o CMT, es un grupo de trastornos genéticos del sistema nervioso periférico. El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares informa que la CMT afecta aproximadamente a una de cada 2,500 personas en los Estados Unidos. La CMT, también conocida como neuropatía sensorial y motora hereditaria, afecta los nervios periféricos, con síntomas como caída del pie u otras deformidades del pie, incluidos los arcos altos. La debilidad puede afectar el tono muscular en la parte inferior de las piernas y las manos. La degeneración nerviosa conduce a la reducción de la sensación de calor y frío o en la conciencia del dolor. El tratamiento consiste en fisioterapia, terapia ocupacional y dispositivos de asistencia, según sea necesario.
Neuropatía diabética
La neuropatía diabética es un trastorno del sistema nervioso periférico comúnmente informado que se presenta como una complicación de la diabetes. Hasta el 50 por ciento de los diabéticos desarrollan daño nervioso o neuropatía. Los niveles altos de glucosa en la sangre y una disminución en el flujo sanguíneo causan lesiones nerviosas, según MedlinePlus. Las áreas afectadas incluyen las piernas y los brazos, con síntomas como calambres musculares, debilidad, entumecimiento, hormigueo en los pies e insensibilidad al calor o al frío. Otros síntomas que se manifiestan con la neuropatía diabética incluyen la pérdida del control de la vejiga, cambios en la visión, mareos y caída de los párpados, la cara o la boca. Para reducir la progresión o reducir la extensión del daño al sistema nervioso periférico, el nivel de glucosa en la sangre debe controlarse mediante el monitoreo frecuente y los medicamentos según lo prescrito.
Síndrome de Guillain-Barré
Síndrome de Guillain-Barr Es una enfermedad autoinmune grave que conduce al daño nervioso periférico. La enfermedad hace que el sistema inmunitario se ataque a sí mismo, y eso lleva a la inflamación de los nervios. La inflamación del nervio causa debilidad en los músculos de las piernas y los brazos. Además, los músculos utilizados para respirar se debilitan. El adormecimiento y el movimiento descoordinado se manifiestan a medida que se extiende el daño nervioso. Los síntomas como dificultad para respirar o tragar requieren atención médica inmediata. El tratamiento incluye cuidados de apoyo para las dificultades respiratorias y la terapia física. Otras opciones incluyen la plasmaféresis para eliminar los anticuerpos de la sangre o las inmunoglobulinas para bloquear los anticuerpos que causan la inflamación. El tiempo de recuperación varía de semanas a años.