Desglose Digestivo de Proteínas
El proceso de digestión depende del trabajo en equipo sincronizado de órganos, mucosa especializada, glándulas y músculos. Cada característica del tracto digestivo desempeña un papel en la descomposición de los alimentos que consume en una forma que su cuerpo puede utilizar como alimento. Las diferencias en la estructura molecular de los carbohidratos, las proteínas y las grasas son la causa de las variaciones en la descomposición digestiva de estos nutrientes.
Fase inicial de la digestión
La fase inicial de la digestión comienza en la boca. Su boca, al igual que su estómago e intestino delgado, es un órgano digestivo hueco con un revestimiento especial llamado mucosa. La mucosa oral contiene pequeñas glándulas que producen jugos digestivos. Tus dientes descomponen mecánicamente los alimentos en partículas más pequeñas. Sus glándulas salivales, que se encuentran cerca de su boca, segregan saliva, que quiebra químicamente las partículas más pequeñas de los alimentos. El alimento masticado se mezcla con la saliva y forma una masa que se conoce como un bolo. Los órganos huecos del sistema digestivo también están revestidos con músculos lisos que permiten que las paredes de los órganos se muevan en forma de onda. Esta acción muscular se llama peristalsis. Estas características del tracto digestivo superior trabajan juntas para impulsar el bolo desde la boca, a través de la faringe, sobre la epiglotis y hacia el esófago.
Digestión de pepsina y proteínas en el estómago
Una vez que el bolo pasa por su Esfínter esofágico inferior, entra en su estómago. Las glándulas en el revestimiento del estómago producen secreciones llamadas jugos gástricos. Michael J. Gregory, PhD, miembro de la facultad de Clinton Community College, explica que a la vista de la comida, su cerebro estimula las células endocrinas en su estómago para secretar la hormona llamada gastrina. La gastrina activa tu estómago para segregar jugos gástricos. La presencia de gastrina hace que la mucosa del estómago produzca pepsinógeno. El ácido clorhídrico convierte pepsinógeno en pepsina. La pepsina es una enzima que descompone las proteínas en péptidos. En esta forma más simple, las proteínas pueden ser absorbidas a través del intestino delgado. El papel de la proteasa en la digestión de proteínas
Las glándulas en el revestimiento de su estómago también secretan la enzima digestiva llamada proteasa. La proteasa es vital en la degradación digestiva de las proteínas. Las proteínas son uno de los compuestos orgánicos más complejos de la naturaleza. Los compuestos que contienen nitrógeno llamados aminoácidos comprenden proteínas. El ácido clorhídrico y la proteasa rompen las proteínas intactas grandes en aminoácidos, que ahora pueden ser absorbidos a través del intestino delgado.
Digestión y absorción de proteínas en el intestino delgado
Los músculos de la pared del estómago luego mueven la comida en el duodeno, que es la primera parte del intestino delgado. El duodeno y el páncreas continúan la degradación digestiva de las proteínas con la ayuda de otra enzima llamada tripsina. La mucosa intestinal secreta otra enzima llamada peptidasa, que completa la digestión de los péptidos en aminoácidos. El intestino delgado absorbe los aminoácidos, lo que les permite entrar en el torrente sanguíneo. Desde aquí, su cuerpo puede reensamblar estos aminoácidos en nuevas proteínas necesarias para la función celular.