Tendinitis de Aquiles: Remedios naturales para la curación

Cuando el tendón de Aquiles está sobrecargado de trabajo por actividades como correr o saltar, puede producirse una tendinitis. La tendinitis de Aquiles se caracteriza por el dolor y la inflamación del tendón que hacen que caminar y correr sean dolorosos y difíciles. Hay grados de severidad de la tendinitis de Aquiles, y las condiciones más severas requieren más tiempo para curarse. Para la mayoría de las condiciones de tendinitis de Aquiles, los remedios naturales se pueden usar para la curación, y generalmente dan buenos resultados. La mayoría de los remedios se pueden realizar en el hogar y con poco o ningún costo.

Descanso

Si la tendinitis de Aquiles se detecta temprano, el cuerpo puede curar el tejido inflamado si se le permite hacerlo sin estrés adicional en el tendón. Por lo tanto, es importante descansar la articulación del tobillo durante el tiempo que sea necesario. La revista "American Family Physician" sugiere que debe descansar su articulación del tobillo de dos a cuatro semanas para la tendonitis de Aquiles de intensidad leve a moderada. A veces, es necesario inmovilizar el tobillo con una férula o yeso, especialmente en casos más severos.

Hielo y calor

La tendonitis de Aquiles se caracteriza por la inflamación del tendón. Si la inflamación aumenta, el área puede comenzar a hincharse. "American Family Physician" recomienda que esto se trate mejor con bolsas de hielo en el tendón. El hielo debe aplicarse dos o tres veces al día. Sin embargo, use hielo solo durante las primeras 48 horas después de que aparezcan los síntomas para controlar la inflamación. Después de 48 horas, debe facilitarse la curación, y esto se logra mejor con calor. Las toallas húmedas calientes o una almohadilla térmica son efectivas para promover el flujo de sangre, que se requiere para la curación. Aplique el calor de tres a cuatro veces por día.

Masaje

No se conoce bien por qué el masaje funciona para tantas lesiones musculoesqueléticas. Sin embargo, se cree que el masaje mejora el flujo sanguíneo y el drenaje linfático para facilitar la curación de los tejidos dañados. También evita o rompe las micro-adherencias, que son una forma de cicatrización que puede causar dolor. Como se describe en el libro, "Dominio clínico en el tratamiento del dolor miofascial", la liberación miofascial es una técnica de masaje que apunta específicamente a romper las adherencias entre el músculo y la fascia. Una técnica relacionada conocida como masaje de fricción transversal se usa a menudo sobre los tendones dañados. Sin embargo, aunque se usa ampliamente para tratar la tendinitis de Aquiles, su eficacia ha sido cuestionada. Cualquier masaje puede provocar dolor, dolor y molestia, y esto suele ser temporal. Los tejidos mal masajeados pueden provocar complicaciones más graves, como sangrado y daño a los nervios. Por lo tanto, se recomienda elegir un profesional de masajes calificado.

Acupuntura

La acupuntura se usa ampliamente para aliviar el dolor en varias áreas del cuerpo. También se puede usar para tratar el dolor de tendinitis, aunque se desconoce si realmente acelera la curación y la recuperación de la tendinitis de Aquiles. Precisamente por qué la acupuntura alivia el dolor se desconoce y no se conocen sus mecanismos fisiológicos. Sin embargo, los Institutos Nacionales de la Salud han determinado que la acupuntura es un remedio eficaz para el dolor. El tratamiento de acupuntura generalmente requiere una sesión tres veces por semana. El período de tratamiento generalmente dura varias semanas.

Entrenamiento excéntrico

Un informe de 2004 en el "British Journal of Sports Medicine" confirmó que el entrenamiento excéntrico es efectivo para tratar la tendinitis de Aquiles. Con respecto específico a la tendinitis de Aquiles, el ejercicio excéntrico se refiere a activar o contraer los músculos de la pantorrilla durante su período de alargamiento. La técnica implica una progresión gradual de los ciclos de flexión y extensión del pie bajo la carga de peso del cuerpo. Esto produce un fortalecimiento progresivo en el momento en que los músculos de la pantorrilla se contraen. Los resultados clínicos muestran que esta terapia es más efectiva cuando se usa en combinación con hielo, calor y otras terapias de ejercicios suaves. La terapia de entrenamiento excéntrica para la tendinitis de Aquiles se debe realizar bajo la supervisión de un terapeuta, ya que una técnica inadecuada puede provocar una lesión en el tendón.