Mal aliento e intolerancia a la lactosa
La intolerancia a la lactosa, que es la incapacidad del cuerpo para digerir correctamente la lactosa, es una condición que afecta a hasta 50 millones de personas que viven en los Estados Unidos. Sin embargo, es posible vivir cómodamente con intolerancia a la lactosa, siempre que realice los cambios necesarios en su dieta, específicamente, si evita la leche y otros alimentos que contienen lactosa. Seguir bebiendo productos lácteos puede causar una variedad de efectos secundarios desagradables, incluido el mal aliento. El mal aliento no significa intolerancia a la lactosa.
El mal aliento no es un síntoma común de la intolerancia a la lactosa, señala el National Digestive Centro de información de enfermedades. La lista de síntomas comunes de la organización incluye dolor abdominal y distensión abdominal, exceso de gases, diarrea y náuseas. Si tiene mal aliento, es más probable que la afección se relacione con una mala higiene dental, estrés, fumar o medicamentos que resecan su boca. Hable con su dentista o médico para identificar la causa.