La conexión entre la baja concentración de estrógeno y la vitamina D

La vitamina D es una vitamina soluble en grasa que el cuerpo humano utiliza para la mineralización ósea, el crecimiento celular y la función inmunológica. La vitamina D también reduce la inflamación. El compuesto se puede encontrar en algunos alimentos y está disponible como suplemento. La luz solar contiene la vitamina y los humanos pueden absorberla de la simple exposición al sol. Una vez ingerida, la vitamina D pasa por varias transformaciones antes de que el cuerpo la pueda usar. Estos procesos tienen lugar en el hígado y el riñón. Las deficiencias en la vitamina D están asociadas con diversos trastornos, como el raquitismo en niños y la osteoporosis en adultos mayores. Además, mucha investigación ha analizado la vitamina D y las hormonas, especialmente el estrógeno.

Vitamina D y hormonas

La vitamina D se estudia tanto en primates humanos como no humanos para comprender mejor la conexión entre la sustancia y las hormonas. En una revisión publicada en la revista "Esteroides" por investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles, los científicos discuten cómo las deficiencias en la vitamina D pueden relacionarse con los sitios de unión de proteínas a nivel celular. A través de un análisis científico complejo, el artículo revela que hay proteínas específicas determinadas por el ADN que controlan la capacidad del cuerpo para usar y procesar la vitamina D y el estrógeno. Esto sugiere que las personas resistentes a la vitamina D también pueden estar en riesgo de niveles bajos de estrógeno.

Vitamina D, estrógeno y cáncer

El cáncer de próstata es una de las principales causas de muerte entre los hombres. La enfermedad tiene desequilibrios subyacentes de ciertas hormonas como el estrógeno. En 2011, los investigadores en Hungría analizaron específicamente el papel de las proteínas responsables de ayudar en el uso del cuerpo de vitamina D, estrógeno y calcio en pacientes con cáncer de próstata. Su estudio, que se publicó en el "Canadian Journal of Urology", mostró que las personas con receptores de unión a proteínas genéticamente dañados para el estrógeno y la vitamina D tenían más probabilidades de desarrollar cáncer de próstata.

Cáncer de mama y vitamina D

En 2011, los investigadores del Instituto de Cáncer Roswell Park en Nueva York publicaron los resultados de un estudio de cinco años de duración que realizaron sobre los niveles de vitamina D y estrógeno en mujeres con cáncer de mama en las etapas de pretratamiento. Encontraron que las mujeres que aún no habían comenzado la menopausia tenían niveles significativamente bajos de vitamina D, así como una relación con los receptores de estrógeno que no funcionan correctamente. Su estudio sugiere que existe una fuerte correlación entre la deficiencia de vitamina D, los receptores de estrógeno negativos y el cáncer de mama. Señalan que una mayor investigación puede llevar a que los suplementos de vitamina D formen parte de un régimen de pretratamiento.

La genética y la conexión de vitamina D-estrógeno

La investigación, principalmente en las áreas de tratamiento y prevención del cáncer, ha analizado detenidamente En la relación entre la vitamina D y el estrógeno. Parece que la mayoría de los trabajos apoyan la idea de que los sitios de receptores de estrógeno y vitamina D determinados genéticamente trabajan en conjunto para garantizar que el cuerpo pueda ingerir y procesar los minerales y las hormonas que necesita para una salud óptima. Entonces, mientras que la investigación ha establecido un vínculo entre estos dos compuestos, se necesitará más trabajo para mostrar el alcance y las implicaciones de esta relación.