¿Cómo digiere el cuerpo los carbohidratos?
Los carbohidratos que consume en su dieta le proporcionan a su cuerpo la energía necesaria para las actividades diarias y garantizan el funcionamiento adecuado de sus sistemas corporales. Tanto los carbohidratos complejos de alimentos como las pastas sin refinar y los granos enteros, así como los carbohidratos simples de fuentes de almidones y frutas se someten a un proceso único de digestión dentro de su cuerpo. Saliva
El primer paso en la digestión de Los carbohidratos comienzan tan pronto como comienzas a masticar la comida. De acuerdo con la Western Kentucky University, la amilasa salival, una enzima en la saliva, comienza de inmediato a descomponer los carbohidratos contenidos en los alimentos que se mastican en ciertos azúcares. Estos azúcares más simples se llaman disacáridos y trisacáridos, y viajan a su estómago cuando traga.
Carbohidratos en el estómago
Los carbohidratos parcialmente descompuestos viajan a través del esófago y entran al estómago después de tragarlos. Una vez dentro del estómago, las paredes celulares de los alimentos que contienen azúcares de carbohidratos se descomponen con ácido clorhídrico en el estómago, preparándolos para la siguiente etapa de su viaje digestivo. Su corta estadía en el estómago termina cuando los carbohidratos parcialmente digeridos viajan a través de una válvula muscular al final del estómago, lo que les permite ingresar al intestino delgado, donde comienzan las etapas clave de la digestión de carbohidratos.
Páncreas y el intestino delgado
En el intestino delgado, los azúcares de carbohidratos pasan por las etapas finales de la digestión. Una enzima que se produce en el páncreas, la amilasa pancreática, ingresa en el intestino delgado y comienza a descomponer los azúcares largos en carbohidratos en formas más simples de azúcar. El intestino delgado secreta otra enzima llamada maltasa, que descompone aún más los azúcares en glucosa y fructosa, mientras que otra enzima intestinal, la sucrasa, descompone la azúcar sacarosa en glucosa y fructosa, también.
Glucosa y fructosa
Los carbohidratos que comenzaron su viaje en la boca mientras los masticaba ahora se han dividido en formas más simples que su cuerpo puede usar para obtener energía. Estos dos azúcares, glucosa y fructosa se absorben en el torrente sanguíneo. Luego, se envían a los músculos, órganos y tejidos, donde se usan para los procesos metabólicos de su cuerpo, para mantener las células sanas, y le brindan la energía que necesita para las actividades diarias.