Enterococcus faecalis es una bacteria esférica que forma parte de la flora normal de los humanos. De hecho, de acuerdo con el libro de texto en línea de bacteriología de Todar, Entercoccus faecalis se encuentra comúnmente en las regiones vaginal e intestinal de aproximadamente el 40 a 80 por ciento de los individuos. Aparte de los humanos y los animales, esta bacteria también se puede encontrar en el suelo y el agua. Si bien algunas cepas de Enterococcus faecalis pueden causar infecciones oportunistas y adquiridas en el hospital en humanos, muchas otras cepas se han usado para una variedad de propósitos beneficiosos tanto por la naturaleza como por el hombre.

Probióticos

Junto con otras bacterias que son parte de la flora normal, Enterococcus faecalis previene la colonización de bacterias patógenas en el cuerpo de su huésped al competir con los patógenos por los sitios de unión y los nutrientes. También pueden cebar el sistema inmunológico induciendo la producción de niveles bajos de anticuerpos contra sus propios componentes, lo que, a su vez, hace que el sistema inmunológico sea más eficiente. Estas características de Entercoccus faecalis también se pueden usar para la producción de probióticos, que son suplementos dietéticos y alimentos que ayudan a tratar enfermedades como la diarrea infecciosa, el síndrome del intestino irritable, la caries y la enfermedad periodontal e infecciones vaginales.

Los probióticos están disponibles en forma de yogurt, leche fermentada, miso, productos de soya y algunos jugos y, aunque los probióticos generalmente se consideran seguros, un artículo publicado en la edición de junio de 2006 del American Journal of Clinical Nutrition advierte sobre el uso de probióticos en bebés prematuros e individuos inmunocomprometidos, ya que el mecanismo exacto, los regímenes administrativos apropiados y la interacción de los probióticos con otros medicamentos y alimentos no se conoce completamente.

Industria láctea

Las cepas de Enterococcus faecalis juegan un papel importante en el industria láctea y se producen en una variedad de quesos, suero de leche y leche natural. Se usan más comúnmente en el sur de Europa y ayudan en el desarrollo del sabor del queso y también se pueden usar como cultivos iniciadores de queso. Según un artículo de junio de 2003 en el International Journal of Food Microbiology, Entercoccus faecalis también produce una toxina conocida como bacteriocina que puede prevenir el crecimiento de varias otras bacterias como Listeria monocytogenes, Staphylococcus aureus y Vibrio cholerae, evitando así el deterioro de los productos lácteos.

Tratamiento del acné

Otro uso relativamente reciente de Enterococcus faecalis que todavía se está investigando activamente es el tratamiento del acné. Un estudio publicado en la edición de julio de 2008 del Journal of Microbiology and Biotechnology afirma que un componente proteico de la cepa SL5 de Enterococcus faecalis tiene la capacidad de inhibir el crecimiento de una bacteria conocida como Propionibacterium acnes, que se asocia comúnmente con el acné. Por lo tanto, este puede ser un tratamiento novedoso para el acné.