Síntomas de la sobreexposición a los humos de pintura
Los riesgos de la exposición a los humos de pintura generalmente se asocian con las pinturas a base de aceite, que se usan principalmente en exteriores. Las pinturas de látex producen menos vapores, por lo que se recomiendan para uso en interiores. Aunque las pinturas a base de aceite tienden a usarse en el exterior, se sabe que sus gases se filtran en los edificios y enferman a las personas. Tanto el látex como las pinturas a base de aceite deben usarse en espacios adecuadamente ventilados para evitar complicaciones.
Contacto directo
La pintura con salpicaduras en o alrededor de sus ojos puede causar irritación severa en los ojos. Si tiene pintura en el ojo, debe lavarlo de inmediato rociando agua en su ojo de forma continua durante un par de minutos. Entonces debe visitar a su médico de atención primaria tan pronto como sea posible. Si la pintura entra en contacto directo con su piel, también puede experimentar irritación de la piel o agrietamiento seco de la piel. Asegúrese de lavarse bien la piel cuando termine de pintar.
Inhalación
La inhalación de vapores de pintura durante un período prolongado puede provocar dolores de cabeza repentinos, náuseas, fatiga, mareos y pensamientos confusos o nublados. Si experimenta estos síntomas, debe abandonar inmediatamente el área que se está pintando. Respirar aire fresco durante 15 a 20 minutos debería aliviar la mayoría de los síntomas. Si los síntomas continúan, debería consultar a un médico.
Efectos a largo plazo
La exposición repetida a los humos de pintura a largo plazo puede tener efectos físicos peligrosos. La inhalación frecuente de humos de pintura puede provocar deficiencia de sangre y daños en los órganos, principalmente en los riñones, el cerebro y el hígado. Si está expuesto regularmente a humos de pintura en su trabajo o residencia, debe invertir en sistemas de ventilación adecuados y usar una máscara cuando se aplique pintura.
Prevención
Prevenir la exposición peligrosa a humos de pintura es simple. Cuando pinte una habitación en su casa, abra todas las puertas y ventanas. Instale un ventilador de caja en la ventana orientado hacia el exterior, de modo que pueda expulsar humos tóxicos afuera en lugar de en otras áreas de su hogar. Mantenga el ventilador encendido durante dos días después de pintar o hasta que la pintura esté completamente seca. Si está pintando el exterior de su casa con pintura a base de aceite, asegúrese de que no haya ventilaciones que soplan el aire exterior hacia su hogar. Si comienza a experimentar síntomas, considere abandonar su hogar hasta que finalice el trabajo de pintura.