Cuando el estómago realiza movimientos agitados, produce una serie de poderosas contracciones musculares conocidas como peristalsis. La peristalsis es un proceso coordinado que implica la contracción y relajación secuencial de los músculos de la pared del estómago, empujando la comida hacia el intestino delgado. Estas contracciones rítmicas mezclan la comida con los jugos digestivos, descomponen las partículas sólidas en trozos más pequeños e impulsan el material parcialmente digerido a lo largo del tracto digestivo.