Children With Poor Nutrition
La mala nutrición se debe a la pobreza y la falta de educación sobre alimentación saludable. Los niños que consumen regularmente alimentos bajos en nutrición sufren consecuencias negativas que abarcan muchas partes de sus vidas. Se están realizando avances en las escuelas para proporcionar un mayor currículo de nutrición y para elevar los estándares para los almuerzos escolares. Mientras tanto, los padres que entienden lo importante que son los alimentos saludables pueden darles a sus hijos una ventaja en la creación de una vida saludable para ellos mismos.
Alimentos que ofrecen mala nutrición
Alimentos que se consideran de baja nutrición calidad son aquellas que tienen un alto contenido de grasa, calorías, sal, azúcar y colesterol y contienen poco o nada de vitaminas o minerales. Esto incluye comida rápida, bocadillos procesados, dulces, pasteles, galletas, refrescos, comidas congeladas y muchas de las opciones a la carta que se ofrecen en las cafeterías escolares. Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, los niños que comen comida rápida consumen menos leche, fibra, frutas y vegetales sin almidón que los que no lo hacen. Si los niños se están llenando con estos alimentos bajos en nutrientes, corren el riesgo de ser deficientes en nutrientes que los ayuden a crecer y desarrollarse durante la infancia.
Escuela y rendimiento
Los niños que no alimentan sus cuerpos y los cerebros con alimentos nutritivos no pueden concentrarse y desempeñarse tan bien en el trabajo escolar. El Baylor College of Medicine informa que un desayuno saludable se traduce en mejor atención, recuperación rápida, menos errores y mejor concentración en la escuela por la mañana. Se puede suponer que un almuerzo saludable proporciona estos mismos beneficios para el resto del día escolar. Un desayuno pobre es uno que tiene un alto contenido de azúcar, como una rosquilla o una tostadora. Los niños necesitan comer granos enteros, productos lácteos bajos en grasa, huevos y fruta fresca por la mañana. Una dieta sistemáticamente pobre le quita a los niños la oportunidad de aprender lo mejor que pueden.
Riesgos
Los riesgos asociados con la mala nutrición son muchos y los niños enfrentan problemas de por vida si no obtienen alimentos saludables diariamente. La obesidad es una de las principales preocupaciones a las que se enfrentan los niños cuando consumen dietas deficientes porque son demasiado altos en grasa y calorías, lo que resulta en un aumento continuo de peso. Otros riesgos para la salud incluyen enfermedades cardíacas, depresión, presión arterial alta y diabetes, que se exacerban al ser obesos. El sobrepeso y la obesidad afectan a más de uno de cada tres niños, informa el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades. Una dieta deficiente también contribuye a la caries dental, la anemia y la osteoporosis.
Recomendaciones
La revisión de la mala alimentación de un niño es la clave para reducir el riesgo de problemas de salud y el bajo rendimiento escolar. Los niños deben comer una variedad de alimentos de todos los grupos de alimentos en las comidas y bocadillos, incluyendo frutas, verduras, proteínas magras, productos lácteos bajos en grasa y granos enteros. Estos alimentos cubren las necesidades de fibra, vitaminas A y C, hierro, calcio y grasas saludables para el corazón de los niños. Además, los niños deben hacer por lo menos 30 minutos de ejercicio diario para complementar sus hábitos alimenticios saludables. Limitar los alimentos nutricionales deficientes deja mucho espacio en el estómago de un niño para llenarse con alimentos densos en nutrientes.