Cómo lidiar con los antojos durante la dieta

Los antojos son inevitables, especialmente cuando haces dieta. Cuando limita la ingesta de alimentos, siente que los quiere aún más. La extensión de sus antojos depende de qué tan severos son los cambios en sus hábitos alimenticios. Lograr el éxito de la pérdida de peso significa encontrar una manera de hacer frente a sus antojos. Ya sea que su caída sea chocolate o papas fritas, puede ir más allá de su deseo y seguir adelante hasta que alcance su objetivo final de pérdida de peso.

Beba agua cuando los antojos golpean. El agua es un eficaz supresor del apetito. Cuando su cuerpo intente decirle que tiene hambre de cierta comida, tome un vaso de agua de 8 onzas y espere 10 minutos. Su hambre y su deseo deben desaparecer.

Coma comidas pequeñas durante todo el día. En lugar de tres comidas grandes al día, coma de cinco a seis comidas pequeñas cada tres o cuatro horas, como sugiere el Centro Médico de la Universidad de Maryland. Esto detiene el hambre y evita que los niveles de azúcar en la sangre bajen demasiado. Mantener el nivel de azúcar en la sangre estable es clave para controlar su deseo de bocadillos con alto contenido de azúcar y calorías.

Reduzca el consumo de alimentos procesados. Los alimentos procesados ​​contienen exceso de azúcar, sodio y grasa, lo que aumenta su dependencia de alimentos poco saludables. Reducir el consumo de alimentos procesados ​​y congelados y aumentar la ingesta de azúcares de frutas naturales puede reducir los antojos durante la dieta.

Haga ejercicio durante 30 minutos al día. El ejercicio ayuda a controlar las ganas de comer al liberar endorfinas en el torrente sanguíneo. Su estado de ánimo puede influir en su deseo de comer, y las endorfinas tienen un efecto positivo en su estado de ánimo. Si sus antojos ocurren en momentos específicos del día, alinee sus rutinas de ejercicios con estos horarios.

Dese la oportunidad de disfrutar de sus comidas favoritas. El Centro Médico Naval en San Diego explica que nunca debes decirte a ti mismo que no puedes volver a tener ciertos alimentos, sino que debes aprender a controlar o controlar tu deseo en lugar de pensar que los alimentos están prohibidos. Esto lleva a un antojo automático. La clave es permitirse un tratamiento una vez a la semana o cada dos semanas y disfrutarlo con moderación.