Lesiones de la rodilla y espeleología

La aceleración requiere una gran cantidad de potencia de salida de los músculos de la pierna y ejerce una tremenda cantidad de fuerza sobre las rodillas. La tensión en los músculos de las piernas y las rodillas combinadas con los cambios repentinos en la dirección y las paradas abruptas en los deportes crean un potencial de lesiones en la rodilla. Estas lesiones incluyen distensiones musculares, desgarros de menisco y esguinces de rodilla. Consulte a su profesional de la salud sobre la prevención y el tratamiento de las lesiones de rodilla asociadas con la carrera de velocidad en los deportes.

Lesiones de rodilla

Las lesiones comunes de rodilla entre los atletas incluyen desgarros de menisco y esguinces de rodilla. Un desgarro de menisco es un desgarro del cartílago ubicado entre los huesos de la rodilla. Un esguince de rodilla es cuando uno o más de los ligamentos alrededor de la rodilla se estiran o se rompen. Los músculos que rodean la rodilla, especialmente los isquiotibiales, también son susceptibles a la rotura. Otras lesiones de rodilla incluyen el síndrome de dolor patelofemoral, que es el dolor general de rodilla, y el síndrome de la banda iliotibilial, que es la inflamación de su banda iliotibial, que se adhiere a la parte externa de la rodilla. Los síntomas asociados con las lesiones de rodilla incluyen hinchazón, dolor, rigidez de las articulaciones, debilidad muscular e inestabilidad de las articulaciones.

Sprint

Sprint requiere poderosas contracciones musculares de los músculos isquiotibiales y cuádriceps, que pueden provocar un desgarro muscular y un tirón en la articulación de su rodilla. Una parada repentina o un cambio de dirección mientras corre en los deportes, como el fútbol y el baloncesto, puede causar un desgarro de menisco o esguince de rodilla. Los factores de riesgo para las lesiones de rodilla durante la carrera de velocidad incluyen el mal acondicionamiento, el sobreentrenamiento, la lesión previa de la rodilla y la desalineación de su tobillo, rodilla y cadera. Un artículo de investigación de 2003 publicado en la revista "Canadian Family Physician" también informa que los músculos débiles e inflexibles de los muslos y la pantorrilla pueden aumentar considerablemente el riesgo de lesiones, incluidas las lesiones de rodilla.

Tratamiento

Para reducir sus síntomas y promueva la curación, evite las actividades dolorosas, cubra con hielo el área afectada y use una envoltura de compresión. Tome medicamentos antiinflamatorios y levante la pierna si persiste la inflamación. Discuta con su médico otras opciones de tratamiento, como una rodillera, terapia física y cirugía. Para lesiones graves, pueden pasar de 4 a 12 semanas antes de que pueda regresar a las carreras de velocidad y las actividades normales.

Prevención

Cuando regrese a la carrera de velocidad y otras actividades, su médico puede recomendarle que use una rodilla temporalmente. Brace para reducir su riesgo de lesión. Además, use zapatos de apoyo que proporcionen un cojín adecuado; estos pueden ayudar a mantener la alineación correcta de la rodilla y actuar como un amortiguador mientras corre. Las ortesis también pueden ser necesarias si tiene pies planos o arcos altos. Además, realice un calentamiento y estiramiento antes de correr para mantener la flexibilidad adecuada. Realice ejercicios de fuerza, como saltos y estocadas de una sola pierna, para fortalecer los músculos de las piernas y proteger las rodillas. Por último, para evitar el esfuerzo excesivo y la nueva lesión de la rodilla y los músculos circundantes, aumente la velocidad de carrera y la distancia lentamente, enfocándose en uno u otro a la vez.