Las vitaminas para el TDAH desatento
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es uno de los trastornos del desarrollo neurológico más comunes diagnosticados en niños, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. En cualquier lugar, desde un tercio hasta dos tercios de los casos, el trastorno continúa hasta la edad adulta. Los síntomas del tipo de TDAH predominantemente inatento incluyen dificultad para concentrarse, ser desorganizado y olvidadizo, y no prestar atención a los detalles. Aunque estos pueden tratarse con estimulantes recetados, un número creciente de personas está optando por tratar de controlar o disminuir los síntomas a través de terapias nutricionales como los suplementos vitamínicos. Magnesio
Un estudio preliminar de niños con TDAH encontró su Los síntomas mejoraron un poco mientras estaban recibiendo suplementos de magnesio. Los síntomas de la deficiencia de magnesio reflejan algunos de los síntomas del TDAH, como la disminución de la capacidad de atención y la confusión mental. La función normal del cerebro depende en gran medida del magnesio. Sin embargo, debido a que el mineral está fácilmente disponible en muchos alimentos de origen vegetal y animal, la deficiencia de magnesio entre los que consumen una dieta equilibrada es poco común.
Vitamina B-6
La vitamina B-6 se usa en la El cuerpo crea y usa sustancias químicas del cerebro, incluidas aquellas que se ven afectadas en personas con TDAH. Aunque ciertos estudios han indicado que el B-6 tiene un impacto positivo en el comportamiento de los niños hiperactivos, no se ha realizado un estudio sobre su impacto en aquellos con TDAH predominantemente inatentos. Aunque la confusión, la depresión y la irritabilidad se encuentran entre los síntomas de una deficiencia de B-6, las deficiencias graves son poco frecuentes. Las dosis altas de vitamina B-6 pueden causar efectos secundarios peligrosos como daño a los nervios, así que asegúrese de tomar solo este suplemento bajo la supervisión de un médico.
Zinc
Se ha demostrado que las deficiencias de zinc afectan la función mental. Incluyendo atención, memoria y aprendizaje. El mineral juega un papel clave en la regulación de las sustancias químicas del cerebro relacionadas con el comportamiento. Sin embargo, los altos niveles de zinc en el cerebro también pueden tener efectos secundarios graves, por lo que los suplementos de zinc nunca deben tomarse sin la supervisión de un médico.
Ácidos grasos esenciales
En las personas con TDAH, los neurotransmisores del cerebro son No funcionan como deberían. Debido a que estos se componen de grandes cantidades de los ácidos grasos omega-3 y omega-6, la suplementación puede afectar los síntomas del TDAH, aunque se necesitan estudios adicionales. Estos ácidos grasos se encuentran comúnmente en los suplementos de pescado y aceite de pescado. Los estudios indican que los cerebros en desarrollo de los niños pueden ser especialmente susceptibles a una deficiencia en estas grasas. Si está considerando proporcionar suplementos de aceite de pescado a un niño, consulte a un pediatra acerca de la dosis adecuada.
Advertencias
La administración de altas dosis de vitaminas para tratar afecciones como el TDAH nunca ha sido científicamente efectiva, según La Academia Americana de Pediatría. Algunos estudios iniciales mostraron ser prometedores, aunque no se ha establecido una correlación positiva entre la suplementación y la disminución de los síntomas del TDAH. Además, aunque pueden parecer inofensivas, las vitaminas de venta libre son medicamentos y deben tomarse con cuidado. Ciertas combinaciones o cantidades pueden ser tóxicas o interferir con otros medicamentos. Siempre se debe consultar a un médico antes de comenzar a tomar suplementos vitamínicos, especialmente en dosis altas. Su médico puede ayudar a determinar si existe una deficiencia de vitaminas o nutrientes que pueda estar causando o contribuyendo a los síntomas del TDAH.