¿Cuál es la función de B12 en el cuerpo?
La vitamina B12 es un nutriente esencial con efectos profundos en la salud humana. Está naturalmente presente en alimentos derivados de animales como carne, pollo, pescado, huevos, leche y otros productos lácteos. Como el cuerpo no puede fabricar B12, debe consumirse en la dieta. Se requiere un suministro adecuado de B12 para producir ADN, el material genético en todas las células y para varias funciones vitales del cuerpo.
Reacciones bioquímicas
B12 se requiere para dos reacciones bioquímicas esenciales en la mayoría de las células del cuerpo . Los productos de estas reacciones son necesarios para producir ADN, y muchas proteínas, hormonas y grasas. B12 trabaja junto con el folato, otra vitamina B importante, en muchas vías bioquímicas. B12 ayuda a convertir una sustancia llamada homocisteína en metionina, una ruta importante para reducir los niveles de homocisteína. Esta reacción también transforma el folato en la forma activa necesaria para producir ADN.
Funciones principales
Las dos reacciones B12 son cruciales para el rápido crecimiento de las células y la clave para comprender sus funciones principales en el cuerpo. Por ejemplo, la médula ósea, un tejido similar a una esponja dentro de los huesos, necesita B12 para producir glóbulos rojos sanos. También se requiere B12 para mantener las células en rápida división que recubren el tracto gastrointestinal. Dado que la B12 es necesaria para la producción de ADN y la división celular, los niveles adecuados durante el embarazo son necesarios para el crecimiento y desarrollo fetal normal.
La B12 también tiene un papel fundamental en el desarrollo y la función del cerebro y el sistema nervioso. B12 participa en la formación de la mielina, el recubrimiento protector que rodea las fibras nerviosas. También es necesario producir neurotransmisores, los químicos que transmiten señales nerviosas entre las células.
Deficiencia de B12
Las consecuencias confirmadas de una deficiencia arrojan luz sobre la función normal de B12 en el cuerpo. La deficiencia de B12 altera la síntesis de ADN, que afecta a todas las células en proliferación. Sin B12, las células en desarrollo en la médula ósea no pueden dividirse normalmente para formar glóbulos rojos maduros. En su lugar, se vuelven inusualmente grandes y deformes, y la mayoría nunca abandona la médula ósea. Esto resulta en un tipo específico de anemia, una deficiencia de glóbulos rojos. Una acumulación similar de células anormales grandes que recubren el tracto digestivo puede causar dolor en la boca y la lengua e interferir con la absorción de nutrientes. La deficiencia de B12 daña las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal. En un estudio realizado en 2009 en el "Journal of Neurology Neurosurgery and Psychiatry", la resonancia magnética o IRM del cerebro mostró evidencia de una pérdida extensa de mielina en personas con niveles bajos de B12. Una deficiencia persistente causa daño nervioso irreversible, reflejado por síntomas como entumecimiento y hormigueo, problemas de equilibrio, pérdida de memoria y depresión. Estas complicaciones graves confirman la importancia de B12 para la función neurológica normal.
Posibles funciones
Otras consecuencias de la deficiencia de B12 sugieren que la posibilidad de B12 puede contribuir a la salud ósea y la función inmunológica normal. Los niveles bajos de B12 están relacionados con la osteoporosis, una condición que causa huesos frágiles débiles y un mayor riesgo de fracturas. Un estudio en el "Journal of Bone and Mineral Research" en 2005 encontró que los niveles bajos de B12 estaban asociados con un riesgo 3 veces mayor de fracturas óseas debido a la osteoporosis.
La deficiencia de B12 también se asocia con anomalías de la sistema inmune. Un estudio en "Annals of Internal Medicine" en 1996 informó que las personas con niveles bajos de B12 tienen una mala respuesta a la vacuna contra la neumonía neumocócica, una infección pulmonar grave. Otras anomalías incluyen la función defectuosa de las células que combaten las infecciones y una mayor susceptibilidad a la tuberculosis.
Teorías
Una teoría propone que muchos de los beneficios de la B12 pueden resultar de su efecto reductor de la homocisteína. Los niveles altos de homocisteína aumentan el riesgo de ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, coágulos sanguíneos y abortos espontáneos. También pueden acelerar la pérdida ósea, aumentando el riesgo de osteoporosis y fracturas. Algunas evidencias sugieren que la acumulación de homocisteína en el cerebro y el sistema nervioso contribuye al daño nervioso en la deficiencia de B12. Sin embargo, los posibles roles de la homocisteína y B12 en estas enfermedades y su prevención requieren un estudio adicional.