Bienestar y forma física para personas mayores
Una buena salud física y mental puede mejorar su calidad de vida durante sus años mayores. Además de promover su independencia y mantener su cuerpo fuerte y lleno de energía, el American Council on Exercise declara que la actividad física también puede prevenir o mejorar las condiciones relacionadas con la edad, como la osteoporosis y la artritis, y reduce el riesgo de lesiones y problemas de salud, como Como derrame cerebral y enfermedades del corazón. Combinada con una buena salud mental, esta combinación puede agregar años a la vida.
Move Your Body
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades sugieren que las personas sanas y mayores de 65 años hacen 150 minutos de cardio a la semana . Puede, por ejemplo, hacer 30 minutos de cardio, cinco días a la semana. Si es más conveniente, puede dividir esto en tres entrenamientos de 10 minutos a lo largo del día. Su intensidad de ejercicio debe ser lo suficientemente alta para que no pueda cantar con su melodía favorita, pero aún puede hablar. Algunos ejercicios que puedes hacer incluyen caminar, andar en bicicleta, nadar, hacer aeróbicos acuáticos y bailar. Las actividades cotidianas, como jardinería, jugar con los nietos o limpiar la casa también pueden ser parte de un estilo de vida activo.
Fortalece tu cuerpo
Trabajar contra la resistencia no solo fortalece tus músculos, también fortalece Tus huesos, reduciendo tu riesgo de fracturas. Su riesgo de caerse se reduce, ya que es probable que su equilibrio y estabilidad mejoren. A medida que envejeces, pierdes tejido muscular, lo que puede ralentizar tu metabolismo. El entrenamiento de resistencia combate esto. El CDC favorece el entrenamiento de fuerza al menos dos días de la semana. Sugieren al menos una serie de ocho a 12 repeticiones y, si lo desea, agregue lentamente dos series más. Los ejemplos de ejercicios incluyen prensas para el pecho, flexiones de bíceps, presiones en la parte superior, elevaciones laterales y flexiones de rodilla o pared. Muchos de estos ejercicios se pueden hacer con mancuernas o una banda de resistencia, y mientras está sentado en una silla.
Ejercite su cerebro
Además de mantener su cuerpo sano y fuerte, también debe mantener su cerebro adentro la mejor forma. A medida que envejece, puede llevar más tiempo recordar las cosas que cuando era más joven. Al hacer ejercicio y desafiar a su cerebro, puede mantenerse alerta y prevenir problemas de memoria y deterioro cognitivo. Resolver crucigramas y jugar juegos de palabras puede ayudar, así como aprender una nueva habilidad y cambiar las tareas diarias. Puede tomar una clase de computación, experimentar con diferentes recetas cuando cocina, tomar una ruta diferente al supermercado o lavarse los dientes con una mano no dominante.
Cosas a considerar
Consulte a su médico antes comience una nueva rutina de ejercicios para asegurarse de que su régimen planificado sea seguro para su condición física. Siempre comience a hacer ejercicio gradualmente y, a medida que mejore su estado físico, aumente lentamente la duración y la intensidad. Comience sus entrenamientos con un calentamiento de cinco a 10 minutos para que su sangre fluya y prepare su cuerpo para el trabajo que se avecina. Encuentra actividades que disfrutes, por lo que es más probable que sigas tu rutina. El centro comunitario local puede ofrecer varias clases, como yoga y tai chi, que pueden ayudar a promover su flexibilidad mientras disfruta de la compañía de otros adultos conscientes de la salud.