Problemas de salud relacionados con las fugas de gas natural

El gas natural es un combustible fósil. Se forma cuando las capas de plantas y animales enterrados están expuestos a la presión y el calor durante miles de años. El gas natural se compone principalmente de metano. El metano es un compuesto altamente inflamable. En su forma más pura, el gas natural es incoloro e inodoro. Las compañías fabricantes de gas le agregan un tinte de olor de advertencia que ayuda a detectar cualquier fuga de gas natural. Aunque el gas natural desempeña un papel importante en la industria del automóvil, donde se usa ampliamente como combustible en los vehículos, las fugas de gas natural pueden plantear serios problemas de salud.

Problemas comunes de salud

Exposición al gas natural a través de fugas de gas puede ser dañino Puede provocar explosiones y presentar graves riesgos para la salud que a veces son incluso fatales. Las pequeñas fugas de gas se acumulan durante un período de tiempo y agregan una cantidad significativa de contaminantes que estresan el sistema inmunológico y otras funciones corporales. Según la Biblioteca Nacional de Medicina, "Si se produjo una fuga de gas natural y es grave, se puede reducir el oxígeno, causando mareos, fatiga, náuseas, dolor de cabeza y respiración irregular". Las fugas de gas pueden causar un daño grave a las plantas, lo que también afecta al ecosistema ambiental.

Asfixia

Uno de los principales efectos en la salud de la fuga de gas natural (o la exposición al metano) es la asfixia. Es una condición de salud grave en la que el cuerpo no puede obtener suficiente suministro de oxígeno, lo que puede llevar a la pérdida de la conciencia, daño cerebral y muerte. Las personas con alta sensibilidad química son más susceptibles a esta enfermedad.

Efectos en el sistema respiratorio

Las fugas y la posterior combustión del gas natural liberan grandes cantidades de vapor de agua, cenizas, compuestos orgánicos volátiles y gases tóxicos a la atmósfera. . Estas partículas y sustancias pasan a través de nuestro sistema respiratorio y penetran profundamente en los pulmones y el cuerpo, provocando enfermedades respiratorias. Además, el gas natural es más liviano que el aire y, por lo tanto, se eleva y se concentra más cerca de la cabeza. Los síntomas asociados, como neumonía, náuseas, vómitos, respiración irregular, pérdida de memoria, fatiga, dolor sinusal y dolor de cabeza también se informan debido a la exposición a fugas de gas natural en concentraciones más bajas. Algunos otros efectos adversos incluyen flatulencia, diarrea, estreñimiento, depresión, picazón en los genitales y dolor en manos y piernas.

Efectos fisiológicos

El metanetiol (metil mercaptano) o etanotiol (etilmercaptano) es el olor que es Agregado por las empresas de gas natural para detectar su fuga. Cuando se inhala en cantidades suficientes, el etanotiol produce efectos fisiológicos, como mareos, dolor de cabeza, vómitos, escalofríos, fiebre y pérdida del conocimiento. El gas natural también puede contener varios contaminantes como PCB (bifenilo policlorado), benceno, tolueno y radón (el radón está presente en el gas natural en su estado original). Inhalamos benceno y tolueno durante las fugas de gas. Plantean serias amenazas para la salud. Los PCB, el benceno y el radón son cancerígenos (causantes de cáncer), mientras que el tolueno puede causar daño reproductivo.