Embarazo y dificultad respiratoria
El embarazo es un momento de transformación. Un cuerpo que solía ser sensible y ágil de repente parece caprichoso y no conforme. Es posible que su intestino, vejiga, músculos, articulaciones y emociones ya no parezcan estar bajo control voluntario. Su sistema respiratorio también puede cambiar a medida que progresa su embarazo. Sus pulmones pueden sentirse abarrotados a medida que su abdomen se inflama y aumenta la presión sobre su diafragma, el músculo que controla su respiración. Esto es particularmente cierto al final del embarazo, cuando la mayoría de las mujeres sienten que no pueden respirar profundamente. Sin embargo, aunque el "hambre de aire" leve es normal durante el embarazo, la falta de aliento severa podría indicar un problema grave.
Hormonas e hiperventilación
Tanto los niveles de estrógeno como de progesterona aumentan durante el embarazo. Durante 100 años, los científicos han sabido que las hormonas sexuales alteran los patrones de respiración de las mujeres embarazadas, generalmente durante el primer o segundo trimestre, presumiblemente al estimular los receptores en los centros respiratorios del cerebro. Esta es la forma natural de ayudarlo a proporcionar más oxígeno a su bebé en desarrollo, pero puede hacer que sienta que no puede obtener suficiente aire. Según un informe de un caso en la edición de enero de 2007 del "Canadian Medical Association Journal", entre el 60 y el 70 por ciento de las mujeres se quedan sin aliento durante el curso de sus embarazos normales debido a la hiperventilación inducida por hormonas.
Anemia of Pregnancy
Su requerimiento de hierro aumenta considerablemente durante el embarazo, y la mayoría de las dietas no son suficientes para satisfacer esta necesidad. La anemia, que generalmente se debe a la deficiencia de hierro, afecta a hasta el 80 por ciento de las mujeres embarazadas en algunos países, y es suficientemente común en los países desarrollados para ser un problema importante de salud pública. La anemia causa una serie de síntomas, que incluyen fatiga, debilidad, mareos, poca tolerancia al ejercicio, latidos cardíacos rápidos y dificultad para respirar. La suplementación de hierro de rutina ayuda a reducir el impacto de la anemia durante el embarazo.
Coágulos de sangre
Debido a las alteraciones en las proteínas que coagulan la sangre, las mujeres embarazadas tienen 5 veces más probabilidades de desarrollar coágulos de sangre en sus piernas o pulmones que Mujeres no embarazadas de igual edad. Los médicos usan el término "tromboembolismo venoso" para describir la formación anormal de coágulos, que ocurre con más frecuencia en las venas de las piernas. Aproximadamente la mitad de las personas que forman coágulos en las venas de los muslos también desarrollarán embolias pulmonares, o coágulos en los pulmones. La embolia pulmonar puede desencadenar varios síntomas, como dificultad para respirar de leve a grave, dolor en el pecho, fiebre o ritmo cardíaco rápido. La embolia pulmonar grande puede ser fatal. Las mujeres que desarrollan tromboembolismo venoso durante el embarazo deben ser tratadas con anticoagulantes o "anticoagulantes" para prevenir la embolia pulmonar potencialmente letal. Asma
Si bien el embarazo no aumenta su riesgo de desarrollar asma, el asma preexistente empeora durante el embarazo y el asma mal controlada puede provocar una dificultad respiratoria grave. Esto es particularmente cierto si deja de usar sus medicamentos para el asma por temor a que le hagan daño al feto. Según los autores de un estudio publicado en marzo de 2010 en la revista "Obstetrics and Gynecology", existe cierta evidencia de que el género de su feto podría influir en la gravedad del asma durante el embarazo, ya que los fetos femeninos se asocian con el asma materna más grave. El Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos recomienda la continuación del tratamiento del asma durante el embarazo para proteger a la madre y al feto.
Causas poco comunes de dificultades para respirar
Un número de afecciones menos comunes puede causar dificultad para respirar durante el embarazo. La insuficiencia cardíaca, que puede ser consecuencia de una anemia grave, una válvula cardíaca dañada o aumentos del volumen sanguíneo relacionados con el embarazo, puede anunciarse con dificultades para respirar. La neumonía, la bronquitis o un neumotórax (un pulmón colapsado) pueden causar dificultad para respirar, pero estas afecciones generalmente se asocian con otros síntomas, como tos, fiebre, escalofríos o dolor en el pecho. La falta de aliento durante el embarazo generalmente se debe a cambios corporales normales, pero puede deberse a un problema potencialmente mortal. Si desarrolla dificultades para respirar en cualquier momento durante su embarazo, contacte a su médico de inmediato.