Datos sobre los lípidos
Las moléculas se pueden dividir en dos tipos: hay aquellas que son polares y tienen polos positivos y magnéticos como el agua. Las moléculas no polares son el segundo tipo e incluyen lípidos. Estas moléculas similares a las grasas no se mezclan bien con las moléculas polares, como el aceite en el agua. Los lípidos juegan un papel importante en el funcionamiento de las células y la salud del cuerpo; el exceso de lípidos en la sangre está relacionado con condiciones de salud adversas.
Funciones lipídicas en las células
A nivel celular, los lípidos funcionan para almacenar energía, proteger las células y producir moléculas de señalización. Las moléculas de grasa contienen 9 calorías dietéticas por gramo, que es más densa que los carbohidratos o las proteínas. La grasa puede almacenarse en las células y usarse para obtener energía cuando el cuerpo necesita una fuente de calorías que la dieta no suministra adecuadamente. La descomposición de los lípidos puede contribuir a la formación de ATP, la principal molécula de energía que transporta el cuerpo. Los lípidos protegen las células al componer la mayor parte de la membrana celular. La membrana celular que rodea la célula es análoga a la piel. Dado que no es polar, los fluidos polares a base de agua dentro y fuera de la célula no penetran en la membrana. Finalmente, los lípidos se usan para producir hormonas y otros mensajeros que le dicen a las células qué funciones deben realizar.
Tipos de lípidos
Los tipos comunes de lípidos incluyen los ácidos grasos, los triglicéridos y el colesterol. Los ácidos grasos son largas cadenas de carbono no polares con oxígeno en el extremo. Los triglicéridos tienen tres ácidos grasos largos unidos a la pequeña molécula de glicerol. El colesterol es una estructura anillada que es en su mayoría no polar, pero también tiene un extremo polar. En la sangre, estas moléculas de lípidos están unidas a proteínas para producir moléculas llamadas lipoproteínas. Dos de las lipoproteínas más conocidas incluyen lipoproteínas de baja densidad, o LDL, conocidas como "colesterol malo" y lipoproteínas de alta densidad, o HDL, conocidas como el colesterol bueno.
Lípidos en la dieta
Los lípidos en las etiquetas de los alimentos están listados como grasas y colesterol. Hay grasas que son malas para usted y aquellas que son buenas o mejores para usted. Debe evitar las grasas saturadas y trans. Las grasas monoinsaturadas y trans son mejores para usted. El colesterol debe ser limitado en la dieta. Aunque es importante para mantener la flexibilidad de la membrana celular y producir hormonas esteroides, el hígado es capaz de sintetizar lo suficiente; El exceso de colesterol en la dieta, junto con las grasas saturadas y trans aumentan los riesgos de enfermedad.
Complicaciones de los lípidos altos
Los niveles altos de triglicéridos, LDL y colesterol total en la sangre están relacionados con condiciones de salud adversas. Estas sustancias pueden alojarse en los tejidos. Contribuyen al estrechamiento y el endurecimiento de las arterias, llamado arteriosclerosis. Esto aumenta las posibilidades de desarrollar la restricción del suministro de sangre a las extremidades, conocida como enfermedad vascular periférica; restricción del flujo sanguíneo a los intestinos, conocida como angina intestinal; Daño en el riñón; Ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.