¿Es Omega-3 bueno para las articulaciones?
Su cuerpo tiene más de 300 articulaciones diferentes, que son los puntos donde se unen sus huesos. El cartílago que rodea los extremos de los huesos absorbe los golpes y sacudidas, y el líquido sinovial mantiene las articulaciones móviles bien aceitadas. Pero la inflamación ocasional o crónica en estas articulaciones puede provocar artritis, una serie de trastornos que causan dolor, hinchazón y movilidad restringida. Algunas investigaciones sugieren que agregar ácidos grasos omega-3 a sus comidas puede ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones.
Causas del dolor en las articulaciones
En la osteoartritis, una de las formas más comunes de artritis, el cartílago que recubre los extremos de los huesos comienzan a deteriorarse debido al desgaste del envejecimiento, lesiones u obesidad. Este es el tipo de artritis común en las personas mayores. La artritis reumatoide puede ocurrir a cualquier edad y es una enfermedad autoinmune en la que los anticuerpos del cuerpo comienzan a atacar sus propios tejidos, lo que lleva a articulaciones inflamadas y deformadas. La gota, un tipo de artritis más común en hombres que en mujeres, es un problema metabólico en el que los cristales de ácido úrico se acumulan en el líquido sinovial de las articulaciones; las posibles causas incluyen el consumo de alcohol y algunos medicamentos.
Omega-3 y articulaciones
Los médicos generalmente recetan medicamentos para la artritis, incluidos los antiinflamatorios no esteroideos o AINE. Sin embargo, algunos alimentos pueden funcionar para aliviar el malestar de las articulaciones también. Los principales son los alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, un tipo de grasa poliinsaturada. Una revisión de la literatura científica sobre omega-3 e inflamación, publicada en el "Diario del Colegio Americano de Nutrición" en 2002, concluyó que los omega-3 en el aceite de pescado, a saber, ácido eicosapentaenoico o EPA, y ácido docosahexaenoico o DHA: ha demostrado ser beneficioso para las personas con artritis reumatoide. Un metaanálisis de 17 ensayos aleatorios, publicado en la revista "PAIN" en 2007, también encontró a los omega-3 como "un tratamiento complementario atractivo para el dolor articular asociado con la artritis reumatoide". Investigadores del Hospital Brigham and Women's en Boston atribuyen los efectos antiinflamatorios de los omega-3 a su conversión en resolvina, un compuesto que parece ser capaz de activar un interruptor en la inflamación.
Fuentes de omega-3
Consideraciones
Hable con su médico sobre las posibles interacciones del aceite de pescado con otros medicamentos que esté tomando. Si está tomando anticoagulantes o tiene un trastorno hemorrágico, por ejemplo, los suplementos de aceite de pescado pueden aumentar su riesgo de sangrado. Los suplementos de omega-3 también podrían interferir con la efectividad de los medicamentos para la diabetes. Además, los suplementos y las fuentes dietéticas de omega-3 pueden causar una hinchazón incómoda, gases y eructos.